Con mayorías superiores a la mitad de los votos en las estratégicas urnas de los grandes hospitales descentralizados y distancias considerables sobre sus rivales internos en los organismos nacionales y en Malargüe, el profesor en Filosofía y Teología, Roberto Macho -de la Lista Naranja- se impuso anoche a los aspirantes, el ingeniero Carlos Simón -de la Lista Verde y Blanca con buen desempeño en Lavalle, IPV y Casino- y la laboratorista Blanca Cárdenas -de la Agrupación Verde Anusate, con buena performance en San Rafael y General Alvear.
Los festejos de la Naranja se iniciaron hacia las 21.30 -una hora y media después del cierre de los comicios-, cuando todavía no se daban a conocer los números oficiales por parte de la Junta Electoral y aunque las agrupaciones diferían en los números precisos, todas coincidían en que el resultado era ‘irreversible’.
“Los compañeros han ratificado un modelo sindical asambleario, colectivo, democrático y transparente”, enfatizó el nuevo titular de ATE. “Vamos a dar la discusión para que este funcionamiento sindical se aplique en otros ámbitos sindicales (dijo en referencia a los gremios cegetistas) y vamos a trabajar por la unidad de la clase obrera para enfrentar el ajuste”, remarcó.
En tanto Simón insistió en su desacuerdo con el modelo sindical de los ganadores: “Queremos un funcionamiento más democrático y racional y seguiremos bregando para ello”, enfatizó.
Macho encabezará una conducción acompañado por Jorge Chávez (dirigente de los trolebuses de EPTM) como secretario adjunto y por la actual titular, Raquel Blas, que permanecerá en la comisión directiva como secretaria de Acción Política.
Blas se presentó además como candidata a secretaria general nacional de ATE y anoche peleaba el tercer puesto, por debajo de los dos favoritos: Héctor Godoy de la Lista Verde con referente en Víctor de Gennaro e integrante de la CTA Autónoma que conduce Pablo Michelli y Fernando Acosta de la Lista Verde y Blanca, cuyo secretario adjunto, Jorge Hoffman integra la CTA de Hugo Yasky.
“Tuvimos que superar una campaña muy dura en la que debimos enfrentar a tres aparatos”, dijo Blas en referencia a las estructuras de los gobiernos nacional, provincial y de la conducción nacional de ATE. Esta última había tomado distancias tanto del titular de la CTA, Pablo Michelli, como de la conducción de ATE en Mendoza. “Ratificamos los plebiscitos vinculantes entre los trabajadores y la independencia tanto de los patrones como de los gobiernos”, subrayó Blas, que ayer se mostró muy activa y satisfecha luego del traspié que sufrió en la interna del FIT, como aspirante al Congreso Nacional por el Partido Obrero (PO).
Macho remarcó el criterio de independencia sindical “tanto del gobierno que se va como, en especial, del que viene”. Y adelantó que a las paritarias con el nuevo gobierno de Alfredo Cornejo, ATE irá con la intención de alcanzar “las seis horas de trabajo y el 82 por ciento móvil para los jubilados”.
La elección de autoridades en ATE ocupó un centenar de urnas un cuarto de las cuales fueron volantes, movilizó unos cinco mil afiliados y desplegó un mecanismo de consulta que implicó el traslado de urnas en combis con presencia de fiscales y autoridades provinciales. El proceso se llevó a cabo con normalidad y no se registraron incidentes. El escrutinio final se llevó a cabo en la sede de ATE en la calle Belgrano. Allí cuatro vallas y una docena de policías ordenaron la incesante llegada de urnas y el tráfico de combis.
La Lista Naranja se ubicó en la estación de servicio contigua, donde unas 300 personas realizaron cálculos y proyecciones, mediante el uso de computadoras que tomaron los capó de vehículos como “escritorios”. En tanto, enfrente -cruzando la vía del Metrotranvía- se ubicó un centenar de militantes de la Lista Verde y Blanca con sus propios conteos.