Estudios recientes sostienen que existe una vinculación entre la migraña y los cambios en los niveles hormonales en las mujeres. De alguna manera esta vinculación podría explicar algo que no tiene demasiada evidencia científica aún: por qué estos terribles dolores de cabeza son tres veces más frecuentes en mujeres.
Una publicación en la revista Mayo Clinic Proceedings hace referencia al estudio que realizó la Dra. Stephanie Faubion, quien es directora de la Oficina para la Salud Femenina de Mayo Clinic y autora principal de una reciente revisión de las migrañas en las mujeres.
La especialista asegura que hay momentos de la vida de las mujeres en que hay mayor riesgo de sufrir migrañas y estos están asociados a cambios en los niveles hormonales.
"No sabemos por qué las mujeres son más proclives que los hombres a sufrir migrañas, pero lo que sí sabemos es que las mujeres son más vulnerables en cierto momento de su vida, cuando varían los niveles hormonales", explica Faubion.
“La probabilidad de migrañas aumenta cuando una niña empieza a menstruar. Las mujeres también corren más riesgo de sufrir migrañas después de dar a luz y durante el período alrededor de la menopausia, momento en que los ovarios femeninos empiezan a producir menos estrógeno. Hacia el momento en que la mujer llega a la menopausia, más o menos el 40 por ciento de ellas ha sufrido migrañas”, detalla.
En este sentido se asocia al descenso de la hormona femenina llamada estrógeno. La profesional señaló que hasta el 70 % de las mujeres que sufren migrañas informan acerca de una conexión entre estos ataques y las menstruaciones.
“El momento normal en que se presenta una migraña menstrual es entre 1 y 2 días antes del inicio de la menstruación femenina y hasta 1 o 2 días después de iniciado el ciclo menstrual”, comentó.
En cambio, durante el embarazo, las migrañas disminuyen porque los niveles de estrógeno suben, pero vuelven a aparecer luego de dar a luz porque los niveles de esta hormona descienden bruscamente.
Lo mismo sucede durante el período previo a la menopausia mientras que las migrañas disminuyen después.
La migraña se caracteriza por un dolor palpitante y pulsátil que generalmente se presenta en un solo lado de la cabeza. El dolor puede ser de moderado a fuerte y durar entre 4 y 72 horas. Los ataques generalmente vienen acompañados de náusea, vómito y sensibilidad extrema a la luz y al sonido; en algunos casos, se presenta un aura antes o durante la migraña. Estos son síntomas del sistema nervioso y pueden también incluir destellos de luz, puntos ciegos u hormigueo en un lado de la cara, en un brazo o en una pierna.