La muerte de Desirée Mariottini, la chica de 16 años hallada muerta en Roma, sigue conmocionando al mundo, a medida que se conocen cada vez más detalles de las últimas horas que pasó con vida.
La Policía contó que la adolescente fue violada por una docena de hombres desde el 18 de octubre, cuando la drogaron y abusaron sexualmente. Desirée murió al día siguiente, por lo que se estima que su calvario duró más de 10 horas. Se cree que le taparon la boca con una mano para que no gritara.
Desirée había ingresado a un edificio tomado conocido como "La casa de la droga", donde se vende y se consume heroína. La prensa italiana sostiene que la joven había ido a buscar un celular que le habían robado, aunque circulan versiones que apuntan que en realidad quería comprar drogas.
Este domingo, cientos de romanos se concentraron ante el ayuntamiento de la capital italiana para denunciar el estado de abandono y la decadencia que está viviendo la ciudad y pedir la dimisión de la alcaldesa, Virginia Raggi.
Las organizadoras de la iniciativa también incluyeron en sus reivindicaciones tras la muerte de la joven Desirée Mariottini el problema de la seguridad y el consumo de alcohol.
Había muchas mujeres que cantaban consignas contra los femicidios y la violencia. A la hora del almuerzo llegó el ministro del Interior, Matteo Salvini, quien fue desafiado y acusado de querer explotar lo que sucedió para promover un plan de desalojos y sus políticas contra la inmigración.
Es que por el asesinato de Desirée hay tres sospechosos, dos senegaleses y un nigeriano, que fueron detenidos bajo cargos de homicidio, ataque sexual en grupo y entrega de drogas.