Un hombre asesinó de un disparo en la cabeza a su ex pareja y luego se mató de un tiro en la boca en un aparente femicidio seguido de suicidio ocurrido en la localidad bonaerense de Glew, partido de Almirante Brown, informaron hoy fuentes policiales.
La principal hipótesis de los investigadores es que el femicida decidió asesinar a su pareja y luego suicidarse, porque ella le anunció que no iba a continuar con la pareja.
El hecho -que se conoció hoy- ocurrió alrededor de las 22 de anoche en un domicilio de la calle Montevideo y Kellertas en el barrio Villa París de la mencionada localidad del sur del conurbano, donde la policía fue convocada por la presencia de dos personas heridas de disparos de arma de fuego.
Al arribar, el personal de la comisaría 7 de Glew encontró a los dos miembros de la pareja que vivía en el domicilio en grave estado.
La víctima del femicidio fue identificada por la Policía como Daiana Elizabeth Devuono (27) y presentaba a simple vista un balazo en el rostro, mientras que el hombre, Sebastián Andrés Vedoya (34), tenía un tiro en la boca efectuado con una pistola hallada en el lugar, junto a un árbol.
Ambos fueron trasladados al hospital Lucio Meléndez, de Adrogué, donde Devuono falleció con un cuadro de pérdida de masa encefálica, mientras que Vedoya quedó internado unas horas en estado crítico hasta que hoy murió también por la gravedad de la herida que presentaba orificio de entrada en la boca y salida en la región del occipital del cráneo.
Según lo que pudieron reconstruir los policías que concurrieron al lugar, Devuono y Vedoya atravesaban desde hace un tiempo problemas de pareja y en la actualidad el hombre no estaba viviendo en el domicilio.
El tío de Vedoya, quien es vecino del lugar, explicó a los investigadores que anoche se escucharon gritos, una fuerte discusión entre la pareja y un disparo.
Cuando el hombre salió a la calle a ver lo que sucedía, vio que su sobrino salía de la casa con un arma de fuego en la mano y gritando que se iba a pegar un tiro, tras lo cual se puso el caño de la pistola en la boca y se disparó.
El arma, una pistola marca Bersa Thunder 9 milímetros, fue secuestrada en la calle, junto a un árbol, en el lugar donde Vedoya se autodisparó frente a testigos.
Los voceros revelaron que al consultar antecedentes en la comisaría de la Familia y la Mujer de Almirante Brown, no se encontraron registros de denuncias previas de violencia de género de parte de Devuono a Vedoya, pero los familiares declararon que la relación era conflictiva y tenían idas y vueltas.
“La mujer había anunciado su decisión de terminar la relación en forma definitiva y el hombre decía que si ella lo dejaba él la mataba y se mataba”, dijo un jefe policial que trabaja en la pesquisa.
La causa, en principio caratulada como "femicidio y suicidio", quedó en manos de la fiscal Marcela Juan, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 16 Especializada en Violencia de Género del Departamento Judicial de Lomas de Zamora.
La fiscal dispuso que ambos cuerpos fueran remitidos a la morgue judicial de Lomas de Zamora para su correspondiente autopsia.
El femicidio de Devuono es el número 30 registrado en todo el país en lo que va del año, a un promedio de uno cada 36 horas, según la información difundida por fuentes policiales y judiciales.