Policiales
Bariloche: un turista español se descompensó y murió en la aerosilla del cerro Campanario
hace 53 minutos
Un hombre de 51 años fue asesinado esta tarde de un disparo en la cabeza cuando se encontraba en el interior del barrio San Martín de Ciudad.
El hecho ocurrió minutos después de las 16 frente a la casa 19 ubicada en la manzana "K" del populoso vecindario capitalino, donde vivía la víctima, identificada por la Policía como Aníbal Pesetti.
De acuerdo a lo que pudieron reconstruir los pesquisas, y confiaron a Los Andes, Pesetti tenía conflictos con varias personas. Se vanagloriaba de sus antecedentes, los que empleaba como sinónimo de valentía. Al parecer dos de los enemigos que supo cosechar en vida llegaron esta tarde a la puerta de su casa y comenzaron a disparar.
Pesetti no quiso pasar por cobarde y salió a la vereda para ver quién se animaba a hacerle frente. Pero entonces encontró la muerte. Un proyectil le dio en la cabeza y le quitó la vida al instante. Su cuerpo quedó tendido en el umbral de la puerta de ingreso a la vivienda con un orificio en el sector derecho del parietal.
Al escuchar las detonaciones, varios llamados de vecinos ingresaron al 911. Cuando una ambulancia del Servicio de Emergencias Coordinado llegó al lugar, el médico a bordo sólo pudo constatar el deceso del ex convicto.
Peritos de Policía Científica recogieron de la escena dos vainas servidas calibre 9mm. Por las características del hecho, se sospecha que se trató de un "ajuste de cuentas".
La investigación quedó en manos de la Fiscalía de Homicidios.
Quién era la víctima
El historial delictivo de Aníbal Pesetti, con casi 30 causas registradas, comenzó a trazarse en 1984, según consta en los expedientes judiciales. Sólo en ese año registra un hurto y dos hurtos agravados. Al año siguiente pasó a cometer robos. En su prontuario figuran uno cometido en marzo y otro en agosto de 1985.
Las causas se fueron agravando con el paso de los años. Le achacaban por lo menos 28 delitos. Entre ellos se cuentan abuso de armas, lesiones, robos agravados y amenazas.
El 18 de agosto de 1985 Pesetti fue acusado de haber cometido un homicidio, por el que fue condenado a 13 años de prisión.
Pero en su registro delictivo también figuran intentos de escapes, resistencia a la autoridad, fugas y lesiones provocadas a uniformados.
En abril de 2012 fue acusado de cometer un abuso sexual simple y un año después le computaron un robo agravado por el uso de arma de fuego.
Una vida tras las rejas
En agosto de 1986 Pesetti fue condenado a 13 años de prisión por un homicidio. Durante su estadía en la cárcel sumó otras causas como lesiones y resistencia a la autoridad, incendios, daños e intentos de evasión.
En noviembre de 1988 fue trasladado a la unidad penal 17 en la provincia de Misiones.
Entre 1991 y 1994 Pesetti obtuvo tres rebajas de pena y en diciembre de 1994 consiguió el beneficio de libertad condicional otorgado por la Segunda Cámara del Crimen.
Pero seis años después volvería a una celda luego de que se comprobaran dos hechos de resistencia a la autoridad. Entonces fue condenado por el Tercer juzgado Correccional a un año y seis meses de cárcel porque además fue considerado reincidente.
El 11 de septiembre de 2000 quedó libre luego de cumplir la pena impuesta.
En febrero de 2002 Pesetti fue encontrado por la Policía con un arma de guerra en su poder. Por ello fue sentenciado a pasar 3 años y 4 meses en el penal. Cumplió su condena en junio de 2005 y ganó la calle.
Tres años después, Pesetti caería nuevamente, esta vez por robo simple. En 2008 fue condenado a seis meses de prisión efectiva.
Al parecer, Pesetti no podía alejarse del delito. La Primera Cámara del Crimen lo condenó a seis meses de prisión efectiva en marzo de 2013 por abuso sexual simple. Ese mismo año, pero en mayo, recibió una pena de 2 años por tentativa de robo agravado por arma de fuego.
En julio de 2013 fue trasladado desde el penal de Boulogne Sur Mer al complejo penitenciario Almafuerte, en Cacheuta.
Por las dos últimas causas, se le unificaron las penas y el Primer Juzgado de Garantía de Flagrancia determinó que debería pasar cautivo dos años y seis meses.
El 20 de octubre de 2015 cumplió la última pena impuesta y abandonó la cárcel Almafuerte con el consentimiento judicial.
