Un fuerte terremoto de 7,4 grados sacudió hoy América Central y México y dejó al menos 39 muertos, 155 heridos y decenas de desaparecidos en Guatemala, además de desatar alertas de tsunami en El Salvador y Nicaragua.
"Tenemos que lamentar el fallecimiento de 39 personas (...) Son datos que tenemos que reconfirmar, pero por el momento es ya una suma que lamentablemente nos está dejando el sismo", dijo el presidente Otto Pérez durante una visita a las zonas más afectadas por el terremoto.
El terremoto, de 7,4 grados en la escala de Magnitud de Momento, ocurrió a las 16H35 GMT, con epicentro en el Pacífico a unos 24 km al suroeste de Champerico, Guatemala, y a una profundidad de 41 km, indicó el servicio sismológico de Estados Unidos (USGS).
El jefe de Estado declaró que todos los muertos reportados corresponden a seis municipios del departamento de San Marcos, ubicado a unos 250 km al oeste de la capital guatemalteca y fronterizo con México.
Asimismo informó que otras 155 personas resultaron heridas y 131 casas destruídas en ese mismo departamento, por lo que habilitaron 11 albergues con capacidad para 800 personas.
Poco antes Pérez había informado sobre la existencia de 15 personas atrapadas bajo escombros y que se buscaba a cerca de un centenar de desaparecidos.
En San Pedro Sacatepéquez, pueblo adyacente a la capital departamental San Marcos, al menos cinco automóviles y pickups quedaron aplastados por la caída de muros. Otras imágenes mostraron carreteras cortadas por la caída de rocas.
Varias horas despues del terremoto persistían los problemas de comunicación con la zona por la pérdida de enlaces telefónicos. Tambien había cortes de electricidad.
El ministro de Energía, Erick Archila, comentó que el terremoto dejó a 73.000 hogares sin energía, casi todos en el departamento de San Marcos, y recomendó a los pobladores comprar insumos porque restablecer el servicio demandaría varias horas.
En Ciudad de Guatemala, decenas de personas salieron a las calles ante el temblor, en especial en la zona rosa de la ciudad, donde se ubican muchos rascacielos, informaron periodistas de la AFP, que también reportaron cortes temporarios de comunicaciones.
En El Salvador, donde se registraron escenas de pánico, el presidente Mauricio Funes ordenó la evacuación preventiva de un tramo costero ante el riesgo de tsunamis locales, la que finalmente no se realizó porque el océano subio sólo 7 centímetros tras el temblor.
También en Nicaragua se declaró un alerta preventivo de tsunami.
En Ciudad de México se informó sobre la evacuación de edificios en la zona céntrica y en los estados de Chiapas y Oaxaca (sureste), sin que las autoridades reportaran daños.
En la capital mexicana miles de personas dejaron oficinas y escuelas, cumpliendo los planes de evacuación. Estamos "verificando instalaciones como está previsto, (con) helicópteros, patrullas y cámaras", añadió el alcalde capitalino Marcelo Ebrard, a través de su cuenta de Twitter.
"Estuvo de miedo, horrible", dijo a la AFP Uvita Mena, residente de Tuxtla Gutierrez, capital del estado de Chiapas, fronterizo con Guatemala, donde Protección Civil reportó fisuras en edificios escolares, pero ninguna víctima.