El asalto a un supermercado por un magro botín en Las Heras derivó en otro atraco, esta vez al custodio de un camión de caudales que llegaba al lugar y terminó a los tiros cuando un policía intentó detener a los cuatros delincuentes que habían protagonizado los hechos.
El hecho ocurrió minutos después de las 17 en la sucursal de Átomo ubicada en Lisandro Moyano y Guiraldes. Según precisaron fuentes policiales, Mariela Castro (26) se encontraba en el local atendiendo la caja cuando fue sorprendida por cuatro delincuentes armados.
Los asaltantes la encañonaron y le exigieron el dinero de la recaudación, que por esa hora era de 1.500 pesos.
Con el magro botín en su poder, los delincuentes abandonaron el comercio, justo cuando el camión de caudales de la empresa Brinks llegaba a retirar dinero del local.
Lejos de amedrentarse, uno de los ladrones esperó a que el primer custodio del blindado descendiera del vehículo -habitual operativo que se realiza cada vez que retiran dinero de un comercio- para apuntarle con su arma en la cabeza.
En cuestión de segundos y, sin que el custodio pudiera hacer nada, el asaltante le sustrajo una pistola calibre 9mm, cuyo cargador contenía 10 proyectiles.
Con lo sustraído, los delincuentes subieron a un Renault Clio y escaparon, a pesar de los esfuerzos de un efectivo de Infantería que también custodiaba el camión. Es que, al ver el accionar de los bandidos, el policía disparó contra el auto en el que huían, sin lograr que se detuvieran, según precisaron las fuentes consultadas.
El Clio fue hallado abandonado minutos después en la esquina de Mathus Hoyos y Castillo de Las Heras, pero de los ladrones no había ni rastros.
El caso es ahora investigado por la Oficina Fiscal 6 de Las Heras.