El equipo Red Bull de Fórmula 1 fue víctima de un gran asalto en su sede de Milton Keynes (Inglaterra). Seis hombres ingresaron al lugar con dos vehículos 4x4, rompieron las vitrinas de los premios y se llevaron más de 60 trofeos que habían sido cosechados a lo largo de estos últimos años.
“No los podrán vender porque eran ejemplares únicos y resultan muy llamativos. Seguramente los fundirán porque el precio es muy elevado”, dijeron desde el equipo.