Un ladrón murió y un policía resultó herido en la cara en un intenso tiroteo que se produjo ayer por la tarde en una maderera de San José, Guaymallén. Dos sujetos entraron al comercio justo cuando el efectivo -vestido de civil- compraba con su mujer.
Poco después de las 19 de ayer, una decena de disparos alertaron a los vecinos de calle Mitre al 2400, entre Maestros Mendocinos y Julio Rozzi.
Las detonaciones salían de la maderera "El Misionerito II", donde se tirotearon un policía y dos ladrones.
El efectivo -es miembro de la división de Delitos Económicos- estaba comprando por lo que iba vestido de civil y estaba con su esposa, que lo esperaba en la puerta del comercio.
Los ladrones que entraron al local eran dos: uno ingresó a la casa del propietario del comercio y el otro fue directamente al mostrador, donde estaba el policía y el dueño de la maderera.
El delincuente llevaba un arma con la que amenazó a las víctimas para reducirlas. Pese a eso, el policía se abalanzó sobre él e intentó desarmarlo, aseguraron fuentes judiciales. En ese momento, el efectivo recibió un disparo en la cara que le ingresó por el maxilar izquierdo y se alojó en su boca. “Los testigos dijeron que sangraba mucho”, dijo el fiscal de la causa, Tomás Guevara.
Herido, el policía sacó su arma reglamentaria, se identificó y ante la resistencia del ladrón le disparó: lo hirió al menos tres veces en la ingle, tórax y en la cabeza.
Mientras esto sucedía, el sujeto que estaba en la vivienda corrió hacia la calle. Lo mismo hizo el policía, sobre todo porque su esposa lo estaba esperando en la vereda. Ambos se encontraron en el pasillo, donde se produjo otro intercambio de disparos, durante el cual el segundo ladrón huyó corriendo hacia el norte, es decir, hacia calle Rozzi por la que dobló hacia el Este.
No se sabe si en ese lugar lo esperaba un cómplice o si logró huir por sus propios medios. Un dato importante es que en el recorrido que hizo este sujeto se hallaron varias manchas de sangre por lo que se supone que está herido. Anoche se hablaba de la presencia de un auto de color gris a bordo del cual habría huido el ladrón.
La identidad del sujeto abatido fue confirmada por fuentes policiales como Matías Córdoba (29).
Al hospital
Tanto el ladrón herido como el policía fueron llevados en móviles al hospital Central.
El delincuente no llegó con vida. En tanto, el policía iba a ser operado pero, en principio, su estado no es de gravedad.
Cuando se recupere, se le tomará declaración. En principio todo hace suponer que actuó en legítima defensa.
Tras el hecho, al lugar llegaron autoridades judiciales como así también del Ministerio de Seguridad. Policía Científica peritó la zona donde se hallaron varios casquillos -es decir que se usaron pistolas- y otros indicios relacionados con la investigación.
Las armas
Los disparos fueron, a juzgar por las vainas halladas en el comercio y sus alrededores, al menos diez.
En la puerta de la maderera quedó tirada una pistola 9 milímetros que era la que llevaba el ladrón muerto, según confirmó el fiscal Guevara. El otro sujeto logró escapar con su arma.
En tanto, la pistola 9 milímetros del policía en un momento se trabó (“se encasquilló”, dijo una fuente judicial mientras hablaba con un comisario). Fue secuestrada y será peritada.
