El arzobispo de La Plata, monseñor Héctor Aguer, volvió a polemizar con la comunidad homosexual argentina y lamentó la sanción de la ley de matrimonio igualitario, a la que consideró "injusta" y "en contra del orden natural".
El prelado ratificó que fue una "abominación" y una "blasfemia" el video que grabaron en la catedral platense la cantante peruana Tigresa de Oriente y la travesti y militante gay Pocha Leiva, porque "se burlaron" de los signos religiosos.
Las expresiones de Aguer merecieron el repudio de la delegación provincial del Inadi y de la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans, que le exigió al Vaticano "una sanción ejemplificadora" contra el arzobispo.
Aguer, quien el sábado último habló de los homosexuales como personas "depravadas" y "abominaciones amparadas por las leyes" durante una misa de desagravio, sostuvo ayer sus afirmaciones en declaraciones a Radio 10.
El arzobispo insistió en rechazar las leyes que amparan los derechos de la comunidad homosexual, al asegurar que existen "desgraciadamente porque la Iglesia está en contra del matrimonio igualitario. Es una ley injusta porque va en contra del orden natural, no sólo contra la posición de la Iglesia".
"Estoy juzgando objetivamente lo que ocurre en Argentina, y en otros países también, que se llama matrimonio a lo que no lo es, a lo que nosotros no podemos llamar matrimonio, aunque lo diga la ley. Se trata de una doctrina de la Iglesia fundada en el orden natural", agregó.
Aguer se defendió de las críticas por sus expresiones ofensivas al advertir que "no habló" de las personas homosexuales y que sólo se refirió como "depravadas" a las personas que "blasfemaron" el templo platense al filmar un video en su interior.
"Eso no se hace en una iglesia", cuestionó, y reiteró: "Yo respeto a todas las personas, pero lo que ocurrió allí es una abominación".
“Lo siento mucho por ellos, la comunidad homosexual, si se sintieron agraviados”, dijo Aguer, al afirmar que no podía "quedarse callado" ante los hechos ocurridos en la catedral.
Y precisó que cuando habló de "abominación" se refirió "al acto de falta de respeto hacia la eucaristía", al señalar que en el video "esta mujer remedó que comulgaba y establecía una cosa erótica respecto del cuerpo de Cristo", por lo que preguntó: "¿Se puede tolerar algo así? ¿Eso no es discriminación?".
Asimismo, explicó que por "abominaciones amparadas por las leyes" aludía a que "no se puede accionar (judicialmente) contra una cosa así (el video), contra la fe católica y el sentimiento religioso de las multitudes católicas".