Un tremendo accidente de tránsito, el más grave de los que registran las autopistas de Mendoza y el peor en casi cuatro décadas en la provincia, ocurrió en la tarde de ayer, cuando un camión que circulaba a contramano por la ruta 7 y a más de 100 kilómetros por hora, chocó de frente con un colectivo de larga distancia, que viajaba desde Córdoba con destino a la Terminal del Sol.
El accidente ocurrió en San Martín, sobre la lateral norte de la doble vía y a la altura del kilómetro 1.010, a unos 200 metros al oeste del autódromo Jorge Ángel Pena; el tremendo impacto ocasionó el incendio casi inmediato de ambos vehículos, lo que dejó el lamentable saldo de 17 víctimas fatales, la mayoría de ellas incineradas y atrapadas entre los hierros; también hubo 14 heridos que fueron atendidos en los hospitales Perrupato, Central y Lagomaggiore.
"Fue el infierno, nunca vi algo igual; calculo que llegué enseguida, tiré el auto a un costado y me bajé. El colectivo estaba en medio de las llamas y también el camión, que había desparramado toda la carga de ajo", contó José Luis Moya y siguió: "Había gente por todos lados; vi a unas seis o siete personas heridas y quemadas, que se habían sentado en la ruta.
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Algunos pasajeros alcanzaron a bajar y era todo un lío. Me acuerdo que una mujer con el cuerpo lleno de quemaduras y con la ropa pegada por el fuego, paso al lado mío y caminaba sin saber qué hacer. Le dije que me esperara, traté de ayudarla, pero no me escuchó y siguió, iba como en shock".
El colectivo de larga distancia, de la empresa Mercobus, había salido desde Córdoba con destino final en la terminal de Mendoza e hizo antes paradas en San Luis y también en La Paz, donde subieron nuevos pasajeros. La última pausa antes del accidente fatal fue en la terminal de San Martín, donde bajaron algunas personas.
Al momento del choque viajaban en el colectivo 28 pasajeros y dos choferes. Quien iba al mando del vehículo fue identificado por el intendente de Santa Rosa, Sergio Salgado, como José Nievas (40). "Era vecino de La Dormida y manejaba el colectivo", contó el jefe comunal a Los Andes y agregó: "Era un muchacho muy trabajador que deja a una familia sin un padre, tenía una nena de 11 años y un varón de 15. Cuando se enteró, su mamá fue internada en el hospital de Santa Rosa con un pico de presión, pero ya está un poco mejor".
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El camión que impactó de frente con el colectivo de larga distancia pertenence a la empresa brasileña ACM y había cargado ajo en Ugarteche, confirmó el comisario Juan Carlos Caleri. Según testigos, el transporte de carga internacional anduvo al menos cinco kilómetros a contramano por la ruta 7, rumbo al Este, y circulaba a más de 100 kilómetros por hora al momento de estrellarse de frente con el colectivo de pasajeros. Su conductor, de nacionalidad brasileña, murió en el acto.
El caso está en manos del fiscal Martín Scatareggi, que ayer pasó la tarde en el lugar del accidente y más tarde tomando testimonios; entre las declaraciones que deberá investigar la Justicia, algunas señalan que el chofer del camión habría estado alcoholizado al momento de manejar el camión.
Atrapados entre los hierros
Lo cierto es que tras el impacto, los dos vehículos se incendiaron enseguida y el fuego terminó atrapando entre los hierros a muchos pasajeros que no tuvieron posibilidad de salir. A los pocos minutos, el lugar se llenó de ambulancias y también de bomberos, que comenzaron un operativo de traslado de heridos al hospital Perrupato, donde ingresaron 14 pacientes. Sobre el asfalto quedaron restos de vidrios, de chapas, cajas llenas de ajos y también algunos rastros de sangre, que se alejaban hasta 40 metros del colectivo, seguramente de gente que alcanzó a escapar.
El director del hospital, Gustavo Patti, detalló que llegaron al Perrupato 14 pacientes, de los que al cierre de esta edición quedaban internados solamente 8, dos de ellos menores de edad, todos en buenas condiciones de salud. Pero también hubo una persona que murió apenas ingresó a la guardia, otra más que falleció en la sala de operaciones y una tercera que dejó de existir mientras era trasladada en helicóptero al hospital Central.
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Tras el accidente y con el correr de los primeros minutos, llegaron al lugar el intendente de San Martín, Jorge Giménez; el ministro de Seguridad, Leonardo Comperatore; y más tarde lo hizo el gobernador Francisco Pérez, a quien se lo vio consternado por lo ocurrido y muy activo en el lugar, recibiendo información a cada momento.
Ya entrada la noche y cuando las llamas del fuego habían sido apagadas y los cuerpos de las víctimas retirados, maquinaria pesada de Vialidad comenzó la tarea de remover los vehículos. Por todos lados había un fuerte y penetrante olor a humo, a quemado y a ajos.
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