A nueve años de prisión fue condenada ayer una trabajadora sexual brasileña que mató a un ex militar con un cuchillo, durante una cita que mantuvieron en la casa de la víctima.
Ayer, los jueces de la Primera Cámara del Crimen condenaron a Raquel Guadencio Costa (38) por el delito de homicidio simple en perjuicio de Raúl Felipe Guevara Abraham (57), quien fue asesinado el 21 de abril de 2015 en Las Heras.
Durante los alegatos, el fiscal de cámara Javier Pascua pidió que se condenara a la mujer a 15 años de cárcel, en tanto que los defensores oficiales Graciela Cola y Diego Flamant consideraron que se trató de un caso de legítima defensa o bien un caso de homicidio con exceso de legítima defensa.
"Vamos a casar la sentencia. Creemos que es la víctima y que se defendió de una agresión sexual", dijeron los defensores.
El fiscal, en medio de una meteórica jornada -participó ayer de cuatro debates-, fijó su posición indicando que la imputada reconoció ser la autora del crimen, reconoció que era conocida de la víctima, que le había ofertado servicios sexuales en varias ocasiones.
Por otra su parte, afirmó que el día del homicidio, habían bebido y el hombre comenzó a jugar con un cuchillo, el juego se tornó peligroso y por eso le quitó el arma y terminó defendiéndose.
El fiscal
Pascua, durante su alegato indicó que las ocho heridas cortopunzantes -según la pericia- no mostraban que fueran de una defensa, sobre todo una puñalada que fue por la espalda y que terminó dañándole el bazo y le produjo la muerte (la necropsia hecha al cadáver de Guevara indicó que el hombre falleció de un shock hipovolémico como consecuencia de las heridas de arma blanca que recibió.
El fiscal también le dio importancia a la declaración de la víctima, que tras ser agredida murió horas después en el hospital militar.
Finalmente, ayer, el tribunal se inclinó por la posición del fiscal Pascua, pero le dio una pena menor a la solicitada por este.
Detenida en la calle
En la noche del 21 de abril del año pasado, Guevara llegó hasta una dependencia policial de Las Heras herido y contó que horas antes había contratado en la calle a Raquel Guadencio y la había llevado a su casa del barrio Los Peluqueros de ese departamento. Allí consumieron alcohol y luego se produjo una pelea en la que el hombre se llevó la peor parte.
A los policías les costó poco encontrar a la trabajadora sexual ya que -tal como lo había dicho el denunciante- estaba semidesnuda y ebria caminando por la calle.
Tras denunciar la agresión, el hombre fue trasladado hasta el hospital Carrillo de Las Heras, donde le diagnosticaron diversas heridas de arma blanca: dos en el torso, una en la ceja derecha y otra en el hombro, entre algunas más.
Si bien el cuadro en principio parecía de poca gravedad, Guevara fue trasladado hasta el hospital Militar de Ciudad, donde a las 6.38 del 22 de abril dejó de existir.
