Malena Pichot
no tiene pelos en la lengua. Dice: “Sory, no tengo muchas ganas de escribir”, cuando está respondiendo esta entrevista por e-mail (vía que ella misma eligió), ironiza sobre algún verbo que desconoce o suena escueta (¿síntoma de desgano?) Tal vez el personaje es el que responde. O ella, que es así y punto.
La actriz y guionista llegará a Mendoza por primera vez junto al actor Ezequiel Campa (el domingo, en el teatro Plaza). La razón es “Campa - Pichot”, el espectáculo de stand up que estrenaron hace tres años en The Cavern Club, en plena calle Corrientes, bajo el nombre de “Ellos”. Con este formato se presentaron en Chile, Montevideo y varios escenarios de Argentina.
Para los adeptos a las pantallas, la historia es conocida. Pichot explotó en YouTube como la “Loca de mierda”, esa descarnada -y original- parodia de mina destrozada por una ruptura amorosa. Y la catarsis le salió bien: el formato webcam fue refinado por las cámaras HD de MTV. Aunque ella diga que “catarsis” es una palabra que le tiene “las tetas al plato”.
Más tarde se alineó con Guillermo Francella y Juan José Campanella como actriz y guionista de “El hombre de tu vida”; digámoslo: una de las sitcom más interesantes de nuestra vapuleada tevé. En 2012 volvió al medio con “¡Cualca!”, un segmento declaradamente guarro, en “Duro de domar” (los miércoles, a las 22, por Canal 9). Y este año se sumó como columnista en Nacional Rock en “Burundanga”, el programa de Gillespi.
Campa, en cambio, viene del under. Pero también actúa en cine y unitarios. Hasta “Todos contra Juan”, su experiencia televisiva había estado ligada a personajes secundarios. Incluso lo era Ulises, el tipo que interpretó en esta comedia romántica producida y protagonizada por Gastón Pauls que, sin embargo, pasó a una segunda temporada. Ahora, planea protagonizar en Chile su propio programa.
En todo caso, ambos venían indagando por separado en el stand up, género de tradición sajona que Jerry Seinfeld popularizó en los ‘90 y que en Buenos Aires comenzaron a explorar Sebastián Wainraich (uno de los principales referentes), Dalia Gutmann, Andy Kusnetsoff y Diego Ripoll.
Malena Pichot, del otro lado de la pantalla:
-El stand up es un género importado. En los escenarios porteños, ¿qué formas toma?
-No le daría mucha vuelta, es un monólogo. Un monólogo de la forma que quieras, contando lo que quieras, siempre y cuando tengas remates y logres carcajadas seguido. Y no cuentes chistes del estilo “viene un gallego...”.
-¿Quienes son tus referentes?
-No tengo ningún referente argentino en lo que refiere a los monólogos. Pero la lista es larga, nombro algunos por si el que lee quiere googlear: Sarah Silverman, Maria Bamford, Joan Rivers...
-¿De dónde parten tus monólogos? Me refiero a tus fuentes de inspiración.
-Cualquier cosa que me cause gracia de cualquier tema.
-La autorreferencialidad te expone. Pero, ¿sirve de catarsis?
-Por supuesto... La catarsis es una palabra un poquito que me tiene las tetas al plato. Yo hago stand up porque me divierte, porque me parece que está bueno decir cosas, porque vivo con un cuadernito en la cartera anotando boludeces, porque me gusta escribir... Catarsis, ¿de qué?
-YouTube fue tu primer hogar y posteás bastante en Facebook. ¿Siempre te llevaste bien con la tecnología?
-No posteo tanto en YouTube ahora. No me llevo para nada bien con la tecnología, me llevo bien con las redes sociales.
-A la distancia, ¿qué te pasa cuando ves los videos de la “Loca de mierda”?
-Me alegra mucho haberlos hecho. Ya no los veo, por supuesto.
-¿Qué quedó de aquella mujer obsesiva que llamaba 15 veces a su ex novio?
-No sé bien de quién hablás.... ¿de mí? ¿de vos? ¿de una amiga tuya? ¿O de la cantidad de personas que pasaron por esa situación?
-¿Podríamos pensar en una “Loca de mierda” reloaded?
-¿¿¿Te parece que la ‘Loca de mierda’ necesita un “reload”??? ¿Qué puede ser más fuerte que semejante título?
-A partir de esos videos, las mujeres se identificaron con vos. Te transformaste en una suerte de heroína urbana. ¿Cómo fue cargar con esa responsabilidad?
-(“jajaja”, se puede leer en su mail) No siento ninguna carga ni responsabilidad; me estoy divirtiendo.
-Además de actuar en el “El hombre de tu vida” también colaboraste con el guión. ¿Te amilanó, en algún momento, laburar con Francella y Campanella?
-Luego de ‘googlear’ amilanó puedo responder... No, no me dio miedo. O me dio, pero no mucho, creo que pararte en un escenario a hablar sola frente a mil personas te cura de espanto para muchas otras cosas. Por otro lado a pesar de que admiro y respeto mucho a ambos, actuar me divierte y no me lo tomo muy en serio la verdad. Quizás por eso.
-¿Cómo te llevás con el drama?
-¿Con las historias tristes, decís? No me llaman mucho la atención.
-Leí que antes cantabas. ¿Ya no?
-Cuando pinta.
-¿Cómo sigue tu año?
-Día a día.
-¿Podés contarme una anécdota de cuando eras chica o adolescente, que, creas, tenga relación con tu presente?
-Mmm... No me dan muchas ganas de escribir, porque escribí toda la mañana, ¡y tengo el cerebro seco! Sory.
-Da la sensación de que Malena Pichot es una mina que no tiene pelos en la lengua. ¿Lo es?
-(“jajaja”, escribe) Ojalá.
