Luis Alberto Araujo (35) fue imputado ayer por femicidio y enviado a la cárcel por el asesinato de Marina Vedia Durán (40), una mujer que estaba embarazada de tres meses y cuyo cuerpo -mutilado por los animales- apareció el viernes en un canal de Los Corralitos.
Ayer por la mañana el fiscal de Homicidios Gustavo Pirrello, imputó a Araujo por el delito de homicidio agravado por mediar violencia de genero. El detenido escuchó la imputación, decidió no declarar y horas más tarde fue enviado al penal de Boulogne Sur Mer.
Horas antes, los investigadores se aseguraron de que los restos encontrados fueran de Marina Vedia: sus parientes lograron reconocer un calzado y ropa que vestía parcialmente el cuerpo encontrado en Los Corralitos como los que vestía la mujer la última vez que se la vio con vida.
Igualmente el fiscal ordenó que se realice un examen de ADN para confirmar si los restos son, verdaderamente, de la mujer cuya desaparición se produjo hace ya 10 días.
Según detalló una fuente de la fiscalía de Homicidios, en la mañana del viernes un hombre que transitaba por el Callejón Grosso a metros del cruce con Starace, en Los Corralitos, se sorprendió al descubrir un cadáver en un zanjón.
Horas más tarde los investigadores llegaron a la conclusión que los restos encontrados -una pierna, brazos, un cráneo y la columna vertebral- habían sido desgarrados por los animales y también sufrido las inclemencias del tiempo y la acción del agua de canal.
La ropa encontrada en el lugar hizo suponer que se trataba del cuerpo de Marina Vedia Durán, una mujer embarazada desaparecida hace 10 días en una vivienda ubicada a unos 8 kilómetros del hallazgo.
La mujer vivía junto a sus tres hijos y tras recibir una llamada, salió de su casa en horas de la madrugada. Desde ese momento nadie más la vio.
Según los investigadores, las llamadas y mensajes iban destinados al teléfono de Araujo.
Araujo se había presentado en la oficina fiscal 19 de Rodeo de la Cruz para aportar datos sobre la desaparición de su novia pero ya en ese momento habría caído en varias contradicciones que lo ubicaron rápidamente como el primer sospechoso de un caso que todo hace suponer que fue un homicidio.
