En el marco del Tuesday Night Contender Series, se vio el KO más violenta del año, al quedar todo el ring bañado de sangre, en una de las peleas desarrolladas en el centro de entrenamiento de la compañía UFC (Ultimate Fighting Championship) en Las Vegas.
Los luchadores protagonistas de esta sangrienta pelea fueron Don'Tale Mayes y Mitchell Sipe (llegó al duelo con un récord 4-0 en combates de MMA). Tras el codazo recibido por Sipe en su rostro, comenzó a brotar la sangre como si fuera una película gore.
Don'Tale Mayes también finalizó con heridas importantes en su cara, aunque fue el ganador en la segunda ronda, tras la decisión del juez de detener el combate por el estado de Mitchell Sipe.
"Me siento maravilloso, estoy muy feliz", declaró un exultante Don'Tale una vez finalizada la pelea.