Arte y política: una alianza con historia

En la historia de Argentina, de hecho, hay variados ejemplos del arte como vía de expresión de ideas políticas. Es más, yendo a la historia de América Latina, México supo llevar a niveles descomunales en lo que se dio a llamar un movimiento artístico-político: el muralismo.

Yanina Andrea Leonardi, investigadora del Conicet, cuenta desde el archivo histórico  que el primer peronismo diseñó una política cultural que tenía a los obreros como receptores y productores de contenidos, bajo una concepción social del arte. Así, se recurría frecuentemente a distintas disciplinas como la música, la danza, la literatura y el teatro para generar formas asociativas y establecer nuevos hábitos educativos y recreativos entre trabajadores. El objetivo, entonces, era incluir a sectores hasta entonces marginados de consumos culturales.

El humor ha sido otro camino hacia la persuasión política. Siguiendo la línea de las ideas justicialistas la "Descamisada" surgía en 1945 como la primera revista de "humor peronista". Hace muy poco en Mendoza estuvo de paso el dúo cómico Martín Rechimuzzi-Pedro Rosemblat, que a sala llena en el Selectro, satirizaron sobre la actualidad política y el contexto actual, haciendo subir al final del show a la precandidata a gobernadora Anabel Férnandez Sagasti.

Fernández Sagasti parece ser una musa para varios artistas hacedores cuturales. El artista plástico Enrique "Chango" Hinojosa explicó que existe un vínculo indiscutible entre el arte y la política. Para él, funciona no solo como una narración poética de la acción política, sino también como un generador de pensamiento pedagógico, crítico en el pueblo. "El retrato de Anabel se gesta en mi admiración por su lucha inclaudicable en el Congreso junto a Cristina; dos mujeres que luchan por la igualdad y por la justicia social", resumió Hinojosa.

Por su parte, Mariano Espeche Vega explicó que "el arte es una manifestación de la sociedad en la que vivimos" y dijo que la realidad lo atraviesa a la hora de expresarse a través de una obra. "Es una pulsión que fluye desde una fuerte sensibilidad por la política, aquella que se despliega como acto de transformación", expresó. El pintor reflejó a Cristina en varias oportunidades y decidió retratar a Fernández Sagasti porque entiende que ella encarna el proyecto que conducen a nivel nacional la ahora famosa fórmula FF.

Por último, desde un enfoque joven, en la Facultad de Artes y Diseño la agrupación política La Manso desarrolló, a través de la técnica de serigrafía, una serie de afiches para la elección de Federación Universitaria de Cuyo. Con estética bailantera, la propuesta visual busca captar la atención con colores llamativos y la "sabiduría popular" de las pegatinas de lugares bailables. De ahí las paredes universitarias y WhatsApps adolescentes aparecieron con consignas del estilo: "Votá Manso, votá Anabel".

Teresa Parodi, la primera Ministra de Cultura de Argentina (en la gestión de Cristina Fernández) escribió un texto en forma de verso inspirado en la fórmula que lleva a la ex presidenta de vice y que se conoció hace una semana:

Dicen que hay fiesta en el pueblo
los Fernández son la causa
Por eso aún en otoño
la primavera está en casa

Son los muchos de la guía
los que no tienen prosapia
los hijos de la vecina
del obrero que hizo patria
de inmigrantes que vinieron
a construir la esperanza

No tienen otros blasones
No son patricias sus alas
No tienen rango ni estirpe
Son del pueblo que aún aguarda
que vuelva el sol a su patio
que no le roben el alma
que pueda soñar futuro
que rinda lo que trabaja
Por eso hay fiesta en el pueblo
Los Fernández son la causa.