Llenar de hojas
Una idea sencilla, y muy económica para decorar la mesa de Navidad es utilizar las hojas de árboles. En este caso, hojas de magnolia y ramas de pino. Podés utilizar ramas y hojas secas de cualquier especie que encuentres en los alrededores de tu casa. Si utilizas ramas secas sin hojas, conseguirás un efecto más dramático y teatral.
Con muchos manteles
Uno de los principales problemas de la mesa de Navidad es cómo hacer para recibir a tantos comensales. Acá tenás la solución: varias mesas plegables y tablones con caballetes cubiertos con varios manteles. El truco para unificarlo y que no se noten las diferencias es utilizar manteles muy largos que camuflan las distintas mesas, y de una misma gama de color para evitar contrastes demasiado llamativos.
Naturalidad al descubierto
Si disponés de una mesa de un material noble y lindo a la vista, como esta de madera, y no tenés un mantel suficientemente grande, podés prescindir de éste y decorarla con un camino de ramas de romero y velas.
Elegancia low cost
Para conseguir este efecto, solo necesitas unas blondas de pastelería como las que se utilizan para poner debajo de las tartas, y unos frascos de conserva adornados con lazos para poner velas aromáticas adentro. Súper sencillo y elegante.
Belén y camino de mesa
Poner un Belén de Navidad, con su nacimiento, los pastores y los ángeles, directamente sobre la mesa. Aquí se decoró la mesa navideña poniendo un camino de paja en diagonal con el nacimiento en el centro y todas las figuritas a los lados.
Papiroflexia
Si te gusta la papiroflexia o los detalles de papel, podés llenar la mesa con adornos confeccionados con este material. Otra opción es forrar adornos tradicionales navideños con papel de periódico o de libros antiguos.
Los colores de la sofisticación
En este caso optamos por decorar la mesa con solo dos tonos: blanco y dorado. Y todos los elementos son de estos colores. Desde la vajilla hasta los candelabros y los cubiertos, pasando por los manteles y las estrellas que están repartidas entre el servicio de mesa.
Dorados, cobrizos, paletas, rosados... Tu mesa de Navidad denotará elegancia usando colores metalizados, desde los detalles dorados de la vajilla, copas de cristal o incluso los candelabros.
Servilleteros navideños
Un truco que nunca falla para dar un toque navideño a la mesa es atar las servilletas con algún detalle que evoque la Navidad, como estas que están atadas con una soga, arbolitos de Navidad y ramitas de pino. Los arbolitos los podés hacer de madera, cartón o cartulina de colores, por ejemplo.
Con guirnaldas
Si no tenés tiempo y debés improvisar una mesa navideña a toda prisa, una fórmula infalible es conseguir una guirnalda como las que se utilizan para decorar el árbol de Navidad y extenderla de punta a punta de la mesa. Se tarda menos en ponerla que en leer este texto.
Minimalista
Aquí tenés una idea sencilla y minimalista. Todo es de color blanco. Y como decoración navideña se ha puesto una bandeja en el centro con una guirnalda de lucecitas y estrellas encima.
Frutas de temporada
Un clásico de la decoración navideña es adornar la mesa con arreglos florales a base de frutas típicas de esta época del año: manzanas, cerezas, uvas, ananá... En este caso, naranja y ananá sobre ramas de ciprés y tela de arpillera, que le da un toque rústico.
Velas y bolas
Otro clásico para darle un toque navideño a tu mesa es poner como adorno repartidas por la mesa bolas como las que se ponen en el árbol y velas por todas partes. Para evitar riesgos, si ponés velas en la mesa, mejor si es dentro de jarrones o frascos altos para no correr el peligro de quemarse cuando se pasan los platos... Los candelabros, por ejemplo, mejor apartarlos de la mesa cuando vayas a comer y dejarlos en los muebles auxiliares de alrededor.
Llenar de aromas
También podés utilizar adornos y detalles que aporten aroma a la mesa como ramitas de canela, romero, lavanda... Y sin olvidar los clásicos ramos de eucalipto.
¿Y los peques?
Si habrá niños a comer, una opción es armarles una mesa propia con papel de embalar pintado y detalles infantiles. Incluso se pueden dejar unos colores sobre la mesa para que los niños acaben de personalizar su espacio y tenerlos entretenidos al mismo tiempo.
Detalles para agasajar a nuestros invitados
Con tiempo y un poco de maña podés “personalizar” tu mesa con detalles decorativos hechos por vos misma que dejarán a tus invitados boquiabiertos. Como aquí, que con retazos de tela de arpillera se han hecho fundas para la cubiertos.
Un ramillete para decorar la silla
Es un detalle que no ocupa espacio pero que viste y mucho la mesa. Con el plus que luego puede regalárselo a los invitados como recuerdo de la velada. Este se ha confeccionado con un poco de muérdago, hojas de pino y de eucalipto y una cinta decorativa.
Un servilletero artesanal muy original
Los detalles importan y mucho en una mesa de fiesta. Como este original servilletero DIY confeccionado con frutos de eucalipto recogidos del bosque y unidos mediante un alambre dándoles forma de corona. Basta atarle una etiqueta con el nombre para indicar dónde debe sentarse cada comensal. ¡Qué original!.