En la última Feria del Libro local, se presentó un nuevo tomo de la obra “Arquitectos en Mendoza. Biografías, trayectorias profesionales y obras (1961-1972)”, que es resultado de una beca grupal del año pasado, financiada por el Fondo Nacional de las Artes (FNA). Es un trabajo enjundioso realizado por un equipo de arquitectos e historiadores, coordinado por la doctora en Ciencias Sociales e investigadora del Conicet Mendoza, Cecilia Raffa.
El grupo buscó, y lo logró, colaborar en el trazado de un panorama general del desarrollo de la Arquitectura en Mendoza a lo largo del siglo XX.
Esta propuesta es la continuación del proyecto Arquitectos en Mendoza (1900-1960), editado en formato de libro de libre acceso digital, disponible en: http://bdigital.uncu.edu.ar/9327
Esta línea de trabajo la podemos vincular con otro emprendimiento de la misma compiladora, titulada “Agentes y prácticas. Biografía colectiva de la Sociedad de Arquitectos de Mendoza en sus primeros años (1953-1969), que ahonda en la creación de la División Mendoza de la Sociedad Central de Arquitectos en 1953 y su transformación en Sociedad de Arquitectos, en 1959, hasta llegar a la creación del Colegio de Arquitectos en 1989.
La reciente compilación pasa revista al recorrido de un conjunto de arquitectos graduados entre 1961 y 1972, que actuaron en la provincia incidiendo en sus aspectos espaciales, particularmente durante la segunda mitad del siglo XX. Esos arquitectos se formaron durante la bisagra que supuso en la disciplina, la incorporación de la vanguardia moderna asociada al diseño de la arquitectura y la ciudad.
“Las décadas del ‘60 y ‘70 -señala la arquitecta Raffa- abrieron en Mendoza, la puerta a una experimentación formal cercana al regionalismo. Paralelamente al gusto por el lenguaje pintoresquista siempre vigente en la arquitectur local, los proyectos ejecutados, particularmente los de arquitectura residencial, comenzaron a mostrar volúmenes puros y losas planas asociados al uso de la piedra, la madera, el acero y el ladrillo a la vista”.
Las obras realizadas por el Estado, entre mediados de la década de 1950 y comienzos de los años ‘70 mostraron el interés por la modernización en la denominada “era desarrollista”, caracterizada políticamente por una sucesión de democracias limitadas y gobiernos de facto. Fue ese el último momento del siglo XX, en que el Estado funcionó como promotor de grandes obras y planes, como la Ciudad Universitaria de la UNCuyo.
A partir de esas décadas, se aceleró la urbanización de la capital mendocina y los departamentos que conforman el Gran Mendoza, y se multiplicó el equipamiento con obras públicas y privadas de envergadura como la Terminal de Ómnibus, el Estadio Mundialista o el Hotel Aconcagua (1978), entre otras.
Los años ‘80 y ‘90 trajeron aparejadas renovaciones urbanas, especialmente enfocadas en el espacio público, de fuerte impacto, la ejecución y remodelación de más espacios públicos, en especial plazas y la creación de sitios que dan identidad a la ciudad, como la Peatonal Sarmiento (1989).
En este contexto de producción, los autores seleccionaron un conjunto de 63 arquitectos, en los cuales concentramos el trabajo biográfico.
Su sitio principal fue la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Mendoza (1961). También formaron parte de agencias estatales como la Dirección de Arquitectura (1936), el Instituto Provincial de la Vivienda (1947), o el Departamento de Obras de la UNCuyo (1960).
El libro no está en papel (un esfuerzo que habría que materializar en el futuro con apoyos privados), pero ha sido editado por el Instituto de Historia del Arte (FFyL-UNCuyo) y está accesible, a través de: http://bdigital.uncu.edu.ar/13376.
