A Independiente Rivadavia se le acabó en La Paternal una seguidilla de siete encuentros consecutivos sin conocer la derrota. La última caída había sido por la fecha 5, en Santiago del Estero.
Tanto tiempo transcurrió desde aquella derrota que sumar puntos había comenzado a convertirse en una sana costumbre para el equipo de Martín Astudillo. Ante el Bicho se cortó la racha de manera abrupta, con un golpe que hace mella.
Ariel Agüero fue uno de los primeros en salir de un vestuario dolido porque además se había dejado la punta de la B Nacional. Argentinos le sacó provecho a muy malos quince minutos de Independiente en el arranque del segundo tiempo y allí radicaba el mayor fastidio del Azul.
“Esto es un mazazo que debe servir para saber que cuando no te concentrás la terminás pagando muy caro y ante Argentinos nos pasó eso”, comenzaba declarando un Agüero al que le costó ensamblar con Yeimar Gómez Andrade y mostró fisuras sobre todo en el juego aéreo, aspecto en el que Independiente había logrado hacerse fuerte. Por lo menos a la hora de defender.
El defensor sanjuanino, que ante Argentinos jugó su cuarto partido como titular en la temporada, disparó dardos justamente contra la última línea del Azul.
“Cometimos muchos errores en los primeros quince minutos, entramos mal parados, nos cambiaron la pelota de un lado para el otro y la diferencia está a la vista. Ellos hicieron la diferencia con el juego que le dejamos hacer nosotros"
-Fueron quince minutos fatales...
-La falta de concentración y paciencia para entrar en el segundo tiempo hizo que en quince minutos terminemos tirando todo al 'tacho'. En el primer tiempo fuimos ordenados para defender.
-¿Argentinos era un buen parámetro para saber dónde está parado el equipo?
-El fastidio personal que tengo es porque nosotros dejamos que crecieran. Son errores que no pueden volver a suceder: falta de paciencia y concentración a la hora de marcar. Le regalamos muchos espacios y cuando jugás tanto tiempo en campo propio lo terminás pagando caro como lo terminamos haciendo.
El Oso volvió a ser titular tras la lesión muscular del uruguayo Sergio Rodríguez, quien volvería a estar a disposición del entrenador para el encuentro del próximo viernes, a las 21, ante Instituto, en el Bautista Gargantini. La Gloria es rival directo del Azul por la permanencia.
La Gloria manda
Independiente Rivadavia disputó 18 encuentros ante Instituto por la B Nacional. Sólo en una oportunidad el Azul pudo vencer a la Gloria y nunca pudo hacerlo en el Bautista Gargantini, donde el equipo cordobés ganó las últimas tres veces que vino.
Nueve son las victorias para Instituto y ocho empates. La única alegría del Azul fue en Alta Córdoba, donde ganó 1-0 con gol de José Méndez en lo que fue el debut de Pablo Quinteros como entrenador.