A lo largo de 96 años, el Sport Club Argentino alternó épocas de gloria y temporadas en las que no pudo ni disputar los torneos locales.
Envuelto en una maraña de problemas económicos que asfixiaban a la institución, que a duras penas podía sostenerse, la gloriosa Academia alvearense logró resurgir de sus cenizas.
Argentino es el primer club en Alvear con dos canchas de césped sintético, la principal y una auxiliar para entrenamiento bajo normas FIFA. Realizaron el cierre perimetral desde cero de todo el predio y el alambrado olímpico. Actualmente, avanzan en la instalación de un sistema lumínico completamente led para todo el estadio "Héroes de Malvinas", con la idea que esté abierto día y noche, y en la construcción de nuevos vestuarios, un gimnasio para entrenamiento equipado y en la renovación total de las cabinas de transmisión para los medios de comunicación. El proyecto también contempla renovar el portal de ingreso al club, además de la construcción de las tribunas, para ampliar la capacidad del estadio; un restaurante y una pileta de natación.
Y aunque algunos busquen definir la situación como un milagro (“o algo excepcional”, como dicen desde la dirigencia), lo cierto que el desembarco de un grupo inversor le cambió la vida a la entidad deportiva y social. Hoy, el conjunto de obras le dan contexto a las aspiraciones de un club que supo aprovechar el momento y canalizar adecuadamente una inversión de $20.000.000.
El primer paso de todo eso se dio en agosto del año pasado, cuando Pablo Castro estaba por viajar a Chile en busca de mejorar su futuro y un llamado lo hizo cambiar de opinión. Hoy es el entrenador del primer equipo de la entidad y fue el puntapié inicial a un presente que nadie imaginaba en ese entonces.
"A través de un alvearense hicimos contactos con un grupo inversor que está inmerso en el mundo del deporte de alto rendimiento y decidieron invertir acá, en un proyecto a diez años. Nadie en ese entonces se imaginó lo que pretendían hacer", contó Castro, uno de los artífices del desembarco de Thikia, el grupo inversor.
“Era un sueño impensado encarar algo así y hoy las obras están a la vista. Además, toda en mano de obra es local y los materiales se compran en Alvear. Todo queda en el pueblo”, afirmó..
Las obras son un ítem más dentro de este ambicioso proyecto. El club cuenta con primera división, inferiores y fútbol infantil.
"Hace un tiempo, habían apenas 20 niños; hoy tenemos casi 70 chicos y siguen llegando. Cada uno, grandes o chicos, recibe ropa de entrenamiento. Además, se les da refrigerio a las inferiores y a los jugadores de primera. También contamos con una nutricionista y un psicólogo. Y hay una condición fundamental que no se negocia en todo este proyecto; el que estudia, juega", agregó el técnico.
El convenio inicial entre el grupo Thikia y el club es a 10 años y en ese tiempo aspiran a catapultar jugadores a las primeras ligas._Sin embargo, el fútbol será solo una parte de todo lo que pretende desarrollar el grupo inversor en la entidad: “Hockey, futsal, vóley, básquet... Queremos estar en todos los deportes”, afirmó Castro. Y agregó: “Encontrar un grupo que viniera a invertir en algo así acá era imposible, pero se logró y apuntamos a cambiarle la mirada al fútbol de Alvear y de la provincia. En esa tarea estamos trabajando y vamos a hacer todo lo posible para conseguirlo”, dijo.
La ayuda a otros clubes
“De que nos serviría estar solos”, fue la frase con que Castro intentó explicar de manera simple porque intervinieron para que Circunvalación no se cayera por completo. Entre distintos aportes, colaboraron para que la entidad pudiera pagar árbitros y la policía y así poder seguir participando en la Liga Alvearense.
“Gracias Academia”, es la inscripción que lleva hoy la camiseta del club Circunvalación.
"Hay chicos muy humildes y queremos que sigan jugando al fútbol, dentro de una liga que los contenga. En la medida que podamos, vamos a colaborar con todos", dijo Castro.
Son 96 años de historia
En el oeste de la ciudad de General Alvear, sobre lo que eran las márgenes del río Atuel, se alza el estadio de uno de los clubes más representativos y significativos del sentir futbolero departamental: el Sport Club Argentino; la gloriosa “Academia”.
En tiempos de Messis y Cristianos, y del fútbol como negocio, instituciones como la "Academia" representan el ideal de los nostálgicos del deporte más popular del país; algo así como una utopía. A lo largo de estos años, este modesto equipo de una barriada trabajadora de General Alvear, ha logrado evadir la visión mercantilista y aspirar a ser el motor de cohesión social de su comunidad.
Un lejano 2 de abril de 1924, nació la “Academia”, una de las instituciones deportivas más destacadas del fútbol local, que supo alzarse con valiosos títulos y lugares de privilegio. De aquel “Foot-Ball Club Juventud Nacional” nos queda el recuerdo de su primer presidente, Pedro Zanabria Gómez, y de algunas legendarias figuras: los hermanos Stornini, Domingo Bengoa, Víctor García y Agustín Videla, entre tantos.
La historia seguiría escribiéndose con nombres como Juan y Julio Aset, Oscar Pérez, Carlos Romo y Antonio Mayorga, quienes marcaron hitos en el andar académico por el fútbol regional.
Durante la década de 1970, el primer equipo del Sport Club Argentino, marco un verdadero punto crucial en el balompié local, ya que se coronó campeón de las temporadas 1970, 1971, 1972 y 1973 con un plantel integrado en su totalidad por jugadores surgidos de su cantera. Este equipo lleno de alegrías a la parcialidad blanquiceleste, y el campeonato de 1974 se definió en una final electrizante con el eterno rival, el Sport Club Pacifico, mediante tiros desde el punto penal.
Pero la historia del club no solo estaría marcada por momentos de gloria, sino también por aquellos que pusieron a prueba el temple y la voluntad de jugadores y dirigencia a prueba. Como aquella temporada de 1986, el descenso golpeó fuerte.
Su resurgir estuvo marcado por, además de grandes éxitos deportivos, un crecimiento institucional. La construcción de su coloso de cemento, su gimnasio cubierto gigante y la sede social con salón multiuso marcaron la década del ‘90.
El influjo de la magia albiceleste continua hasta nuestros días, y aires de renovación y modernidad embargan la querida "Academia" alvearense. Estadio renovado y con los últimos adelantos en tecnología deportiva han llegado al coloso del Sport Club Argentino, dando inicio a una nueva etapa y en búsqueda de más gloria para el alma futbolera que siempre ha tenido General Alvear.
Un trabajo deportivo a conciencia
El Sport Club Argentino celebra sus 96 años de una forma diferente, con un sentir renovado y con el objetivo de estar en lo más alto de fútbol deportivo e institucional de Alvear, con la llega del grupo inversor THIKIA.
En el plano deportivo firmaron jugadores con experiencia: Guillermo Franco (exGodoy Cruz), David Garay (exGimnasia de Mendoza), los alvearenses Ezequiel Pérez (exIndependiente Rivadavia) y Sebastián Garay (exGodoy Cruz y recientemente desvinculado del fútbol de Bolivia). Ellos llegaron para sumarse a un plantel que en está marcado por el profesionalismo de jugadores de la liga local.
En inferiores, el trabajo realizado también tiene una programación que busca mejorar las condiciones naturales de cada futbolista. Todo está planificado para que los jugadores lleguen a Primera División con todas las herramientas para poder desempeñarse. Po eso, mientras que Quinta y Sexta División trabajan todos los aspectos de la preparación física y técnica, en el fútbol infantil, el objetivo es formar a los más chiquitos en educación y valores. "Estos son los principales puntos que buscamos inculcar a los más chicos. Sabemos que todo regresará con mejores perspectivas cuando termine toda esta situación que estamos sufriendo", cuentan.