La Selección argentina de futsal dio un paso importante rumbo al título, al clasificarse a los cuartos de final como líder del Grupo D en el Mundial de Bielorrusia 2015.
En el cierre de la fase clasificatoria, el plantel de Ariel Avveduto, se impuso ante Kurgistán por 2 a 0 y aseguró su carrera de manera invicta. Mañana, por el ingreso a semifinales, se medirá con República Checa. Los europeos ayer dieron el batacazo del torneo al imponerse a Venezuela (2-1) e ingresar a la próxima instancia como los escoltas del Grupo C.
Por el primer objetivo
La Selección albiceleste (con la presencia de seis mendocinos: Federico Pérez, Mauro Albertini, Marcelo Mescolatti, Renzo Grasso, Diego Koltes y Gonzalo Pírez), sorteó la primera fase esgrimiendo dos victorias y un empate.
Como líder del Grupo D, por diferencia de gol, deberá medirse con República Checa. Equipo que ingresó ajustadamente a la siguiente instancia tras imponerse al seleccionado Vinotiento.
Pero la diferencia de calidad en los planteles, no tranquiliza al técnico Ariel Avveduto porque sabe que un error puede dejarlos con las manos vacías. Mañana, a las 15 en la ciudad de Brest, los argentinos jugarán un partido decisivo; la victoria los llevará en semifinales frente al ganador del duelo entre Bielorrusia y Paraguay o Noruega (hoy se definirá el rival tras completarse el Grupo B).
Los argentinos sin espacios
En el último partido de serie clasificatoria, una victoria sellaba el pasaje de Argentina a la zona alta del torneo; mientras que Kirguistán, ya chances matemáticas, salió a la cancha dispuesto a dar la sorpresa de la jornada.
Tramando un cerrojo sobre el arco que defendía Addraimov Daniar, el plantel que dirige Vadim achicó los espacios intentando algún contragolpe fulminante. Los albicelestes, con los mendocinos Marcelo Mescolatti y Diego Koltes en el quinteto inicial, debió trabajar con la circulación de la pelota intentando crear un hueco para un asestar un remate franco.
El tiempo transcurría y el camino hacia el gol se transitó con paciencia. A los 16', el marplatense Mariano Cardone logró quebrar el marcador y esa pequeña diferencia significaba además evitar marchar contra el campeón del mundo, Colombia, en los cuartos.
Luego del descanso, Argentina administró sus recursos y con los cambios que propuso controló de manera intensiva el tránsito del balón. A los 19’, el mendocino Mescolatti puso el broche de oro a una faena que no fue vistosa, pero que al final del día aseguraba mucho más que los tres puntos.