El tenista argentino Diego Schwartzman supo reaccionar a tiempo y edificó su mejor actuación en el Argentina Open, al instalarse en los cuartos de final merced a una trabajosa victoria sobre el brasileño Thomaz Bellucci por 3-6, 6-3 y 6-2 en un partido cargado de emotividad, jugado en la cancha central del Buenos Aires Lawn Tennis Club.
Schwartzman, ubicado en el puesto 24 del ranking mundial de la ATP, consiguió su triunfo sobre el zurdo Bellucci en una hora y 50 minutos ante unas 3.500 personas que lo alentaron en el momento que el partido le era adverso y al final lo premiaron con una ovación en el escenario ubicado en el barrio porteño de Palermo.
El argentino, que había superado en la ronda inicial al austríaco Andreas Haider Maurer (418), jugará su próximo partido el viernes frente al sorprendente esloveno Aljaz Bedene (51), vencedor en la ronda inicial del checo Jiri Vesely (60) y esta tarde del tercer cabeza de serie del torneo, el español Albert Ramos (20).
Schwartzman, de 25 años, se instaló por primera vez en su carrera entre los ocho mejores del Argentina Open, ya que superó sus anteriores accesos a los octavos de final que había logrado en 2013, 2016 y 2017.
El "Peque" tuvo la inteligencia de haber cambiado a tiempo ante un rival peligroso, al que había superado dos veces, en Buenos Aires 2013 y San Pablo 2017. También tenía un par de antecedentes desfavorables, en la final del Challenger de Montevideo 2013, además del Masters 1000 de Roma 2015, con sendos triunfos del brasileño.
El primer set fue de lo peor que mostró el porteño en la semana. Estuvo errático, desconectado y retrasado en la cancha, con tiros cortos que favorecían los 'latigazos' del paulista, dominador de la escena con una gran velocidad en sus golpes y muchos 'winners'.
Para colmo, al argentino no le funcionó el saque y cedió su servicio en tres ocasiones, para quedar abajo 1-2, 3-4 y finalmente 3-6 en el punto que definió el set, en el que además dio la ventaja de haber cometido dos dobles faltas.
En el segundo parcial, el argentino logró un quiebre rápido, se adelantó 1-0 y comenzó a seleccionar mejor sus impactos, con tiros rasantes y variados que comenzaron a dañar la resistencia del tenista nacido en Tieté, San Pablo.
El "Peque", asentado, ya mandaba en la cancha, con mayor variedad de golpes y le táctica de cargar todo el juego sobre el revés del rival, que comenzaba a fallar una y otra vez.
El argentino se llevó el parcial por 6-3 con un nuevo quiebre de servicio que llegó con un slice de revés paralelo de Bellucci que se fue ancho y el partido quedó igualado.
En el parcial definitivo, el "Peque" eligió mejor sus golpes para comenzar a edificar la victoria, y ajustó la devolución. Así logró un quiebre que le permitió pasar al frente por 3-1 y, cómodo en ese escenario, se soltó definitivamente.
Schwartzman, alentado ruidosamente por el público que ansía ver a un argentino en las instancias finales (pronto, el 24 de febrero, se cumplirá una década del título de David Nalbandian en 2008, el último tenista nacional que alzó el trofeo) y lo aprovechó para atacar a Bellucci con 'latigazos' de derecha que le fueron dando resultado al punto de que se adelantó primero por 4-1 y luego 5-2, ante un brasileño que lucía extenuado.
Es que Bellucci había ingresado al torneo tras atravesar la clasificación y si bien en la ronda inicial superó sin mucho esfuerzo al cordobés Pedro Cachín (276), en el tercer parcial sintió el trajín de cuatro partidos en cinco días y las piernas ya no le respondían.
La definición llegó con un nuevo quiebre sobre el servicio de Bellucci, que sacó al medio y la devolución paralela del "Peque" motivó un tiro forzado que se fue ancho y sentenció la victoria por 6-2.
Schwartzman, un tenista que creció muchísimo en los dos últimos años y luce el mejor ranking de su carrera, se llevó los aplausos de un público que más temprano había disfrutado con otro argentino, el bahiense Guido Pella (59), quien se instaló también en los cuartos de final, al imponerse al español Fernando Verdasco (40) por 6-2 y 6-4.
Argentina se aseguró dos tenistas entre los ocho mejores del viernes, uno de ellos con buenas posibilidades, ya que Schwartzman está en condiciones de superar a Bedene, pese a que el antecedente más reciente fue triunfo del esloveno, en Nottingham 2015, esa vez sobre césped, una superficie ajena para el argentino que se desempeña mejor sobre polvo de ladrillo.