A un año del ingreso en el capital de Mastellone Hermanos, dueña de La Serenísima, la dupla Arcor-Danone dio un nuevo paso en un derrotero que podría dejarla a partir de 2020 con el 100% de la principal láctea del país.
La compañía cordobesa anunció que su directorio decidió ejercer la opción para tomar más acciones de Mastellone, un movimiento que debe cerrarse el mes que viene.
Los compradores serán Arcor y Bagley en partes iguales. En esta última empresa, a su vez, la firma argentina tiene el 51%, mientras que la francesa Danone posee el restante 49%.
Ambas sociedades harán un aporte de capital de U$S 35 millones para elevar su participación del actual 20% al 33,5%, siempre y cuando la transacción reciba el visto bueno de la autoridad de Defensa de la Competencia de Brasil, indicó Luis Pagani en una carta enviada a la Bolsa de Comercio.
En diciembre de 2015, a poco más de un año de la muerte del histórico Don Pascual, Mastellone inició un proceso de cambio de manos que podría terminar dentro de 10 años con la salida total de la familia fundadora.
Inicialmente, Arcor y Bagley hicieron un aporte de U$S 50 millones (también en porciones iguales) para quedarse con el 20% en la láctea.
Además, accionistas de Mastellone les vendieron otro 4,99% del capital por U$S 10 millones. El resto de la empresa está en manos de los Mastellone -15 herederos de Pascual, entre hermanos, hijos y sobrinos-, y del fondo Dallpoint, de Carlos Agote (37%).
Ahora se abre una nueva etapa del acuerdo. Los actuales accionistas de Mastellone pueden venderles a Arcor y Bagley acciones que no superen el 49% entre 2017 y 2020. Y, a partir de ese año hasta 2025, el resto hasta alcanzar 100%.
Mastellone arrastra una complicada situación financiera: perdió $ 457 millones en 2014 y $ 616,6 millones al año siguiente. Pero, en los primeros nueve meses de 2016, logró dar vuelta el rojo y ganó $ 46,6 millones. La empresa tuvo ventas por $ 14.079,6 millones en 2015 y $ 1.258 millones hasta setiembre, con más de 4.000 empleados.
En su último balance, tras un 2016 duro, Mastellone aseguró que “el repunte de los niveles de consumo se registrará más fuertemente en el próximo año, aunque no descartamos que en el último trimestre del 2016 comiencen a percibirse señales de mejora”.
La firma, que acaba de inaugurar una planta de secado en Trenque Lauquen, prevé seguir trabajando con los tamberos para incentivar la producción de leche “pensando fundamentalmente en la primera mitad del próximo año”.
Respecto de los costos, buscarán mejorar la productividad, “esperando que la desaceleración inflacionaria que ha comenzado a vislumbrarse nos ayude”.