Antes de que finalizara agosto, en el Centro de Información y Comunicación de la UNCuyo (Cicunc)se hizo la presentación oficial del Sistema Integrado de Información y Gestión para la Refuncionalización del Arbolado Urbano del Área Metropolitana de Mendoza.
¿Será esta la oportunidad real para revertir el penoso estado del arbolado público urbano, que no es responsabilidad solamente de esta administración sino que viene desde hace muchos años?
Todos esperamos que sí porque advertimos que en esta oportunidad hay un fuerte compromiso de varios actores: el Gobierno provincial, a través de la Secretaría de Ambiente, y de la participación del Unicipio, que es un órgano interjurisdiccional del Área Metropolitana, creado en 2016.
Esta última institución estaría comprometiendo a los municipios de Ciudad de Mendoza, Godoy Cruz, Guaymallén, Lavalle, Maipú y Luján de Cuyo, donde se observan muchas falencias en los forestales de esos departamentos.
Como sin fondos no se puede hacer nada en muchos temas de infraestructura, y menos en el manejo y cuidado del arbolado, para las contrataciones y adquisiciones de bienes se contará con la asistencia técnica de la Unidad de Financiamiento Internacional (UFI) del Ministerio de Hacienda de la Provincia.
Muchos son los participantes técnicos que han trabajado para que este programa nos salve de seguir perdiendo a nuestros aliados vegetales. En ese sentido, nadie desconocerá la esforzada labor de más de dos décadas del Consejo Provincial de Defensa del Arbolado Público (Cpdap)y del Centro de Ingenieros Agrónomos de Mendoza (Ciam). Obviamente, hay otros representantes académicos y de la estructura estatal.
No obstante, el diagnóstico del problema, como de alguna manera también ocurre con el agua, no es alentador: "En la actualidad -dice el resumen ejecutivo- el estado del arbolado se encuentra en franco deterioro. Esto se debe a un manejo deficiente en la ejecución de tareas con falta de rigor técnico (elección de la especie, plantación, poda, conducción, (y especialmente) riego, entre otros aspectos), lo termina afectando el estado y la función como servicio público de los forestales", que sin embargo, y pese a lo mal que están, siguen prestigiando a nuestra provincia.
Entonces, es importante que haya compromiso de acción, que se puedan disponer de fondos que provendrán de organismos internacionales, como el BID, y que los plazos de acción se ejecuten como están anunciados en el informe oficial de 106 páginas.
Confiamos en que el compromiso asumido por el Gobierno se cumpla y dé cierta garantía también la intervención de los municipios, a través de esta reciente figura institucional, Unicipio, cuyos componentes, las comunas, tienen que ponerse de cabeza a trabajar en los barrios, las calles y las rutas.
Muchas veces en el pasado se intentaron acciones que se promocionan con cierta pomposidad, y todo resultó penosamente ineficiente, porque si no un documento oficial no hablaría de que "el arbolado se encuentra en franco deterioro debido a un manejo deficiente".
Los resultados con los árboles no son inmediatos… Esperemos entonces que el próximo Día del Árbol (29 de agosto), dentro de un año, se vean indicios de recuperación de la cultura mendocina del árbol, "que un día logró hacer crecer un bosque, donde sólo había arena y piedras".
Igualmente se aguarda que comiencen a efectuarse reforestaciones por todo el territorio y que erradicar un forestal sea sólo por estrictas medidas de seguridad y no por caprichos o falta de conciencia y solidaridad de muchos actores públicos y privados.