El Ejecutivo apura la licitación para contratar una empresa que ponga las 43 máquinas para las 43 mesas en las que los santarrosinos votarán electrónicamente.
El ministro de Gobierno, Dalmiro Garay, dijo que la idea es adjudicar el servicio a fin de este mes, para que la empresa ganadora empiece a colocar las máquinas en oficinas públicas para ir capacitando a los vecinos de Santa Rosa en el uso.
Desde siempre se ha hablado de seis dólares por voto y el padrón de Santa Rosa asciende a 13 mil votantes.
Es decir que la Primaria Abierta, Simultánea y Obligatoria de diciembre y la general de febrero costarían 78 mil dólares cada una, lo cual supone un ahorro si se consideran los costos de impresión de la boleta tradicional de cada partido que compite.
Los santarrosinos serán los primeros en votar electrónicamente en la provincia, aunque cabe una aclaración: no se trata de un voto electrónico en el estricto sentido del término.
En realidad, las máquinas no están conectadas a una red de Internet, sino que se trata de impresoras que emiten un boleto con el voto seleccionado por cada elector en una pantalla táctil, por lo que se la denomina boleta única electrónica.
El día de la PASO o la general, el votante presentará su documento al presidente de mesa, quien le entregará una boleta en blanco que contiene un chip, previo cortar un troquel numerado.
El votante tendrá que introducir esa boleta en una ranura y se habilitará la pantalla con las opciones de voto; al terminar, la máquina emite la boleta impresa con las opciones elegidas.
El sufragante debe doblar esa boleta para que no se vea y presentarla al presidente, que constatará que los números de serie del troquel cortado previamente y la boleta presentada coincidan; entonces se introduce el voto en la urna.
Luego, a la hora del recuento, sólo se debe pasar el chip de cada boleta en un lector y así se van contabilizando los votos.