El 8 de la suerte
Entre todo el público presente sólo 20 afortunados pudieron votar para elegir a la nueva soberana departamental. ¿Cómo se los eligió? Fueron los que tenían documento de identidad terminado en 8 y que llegaron primero hacia la mesa donde estaba la escribana encargada de fiscalizar los sufragios. Por supuesto, muchos que cumplían con esa condición se quedaron con las ganas de ponerle el voto a su candidata favorita.
Clásica impuntualidad
Como siempre, en la multitud no faltaron los silbatos y bombos llevados especialmente para alentar a las distintas candidatas. Pero lo que nadie preveía era que cerca de las 22, cuando el comienzo del espectáculo se demoraba, esos instrumentos se utilizaron como elementos de protesta por la tardanza. El show, programado para las 21.30, dio el puntapié inicial recién a las 22.15. Una vez más quedó demostrado que los mendocinos no nos llevamos bien con la puntualidad.
Los enviados de Paco
La ministra de Cultura de la provincia, Marizul Ibáñez, y el ministro de Turismo, Javier Espina, fueron los únicos representantes del gobierno que acompañaron a Alfredo Cornejo, intendente de Godoy Cruz y anfitrión de la noche. Recordemos que el jefe comunal radical se ha convertido en uno de los más fervientes opositores a la gestión del gobernador peronista Francisco “Paco” Pérez, por lo que no se esperaba mayor presencia provincial en la Vendimia godoicruceña.
Un mar de lágrimas
Agostina Díaz, la soberana saliente, dio la bienvenida a las presentes y se despidió de su reinado, pero la emoción le jugó una mala pasada. Cuando debía decir su discurso, tuvo que dirigirse a la multitud sumida en un imparable llanto. Por supuesto, recibió un aplauso unánime de la gente.
¿Quién es Daniela?
El dúo Oyarzábal Navarro, encargado de la previa del espectáculo, cometió un furcio que despertó las risas de varios en el predio del anfiteatro Menotti Pescarmona. Antes de retirarse del escenario le dedicaron un caluroso abrazo a la reina saliente, "Daniela", cuando en realidad el nombre de quien se despedía del trono era Agostina (Díaz). Aparentemente estaban confundidos, pero nadie se los hizo notar, porque lo repitieron varias veces más.