No hay caso. Año nuevo, misma senda. Anzorena no pudo con Ferro y cayó en el mítico estadio Héctor Etchart por 99-69 y sumó su 19na. derrota del certamen.
Desde la primera acción de la noche, el conjunto de Caballito hizo pesar el valor y la jerarquía de Ezequiel Dentis en la zona pintada. Con seis puntos consecutivos del pivot, el Verde se fue arriba por 7 puntos: 13-6. Esta diferencia hizo que inmediatamente el DT Sebastián Figueredo, pidiera un tiempo muerto y con la pizarra y el fibrón, mostró los ajustes defensivos.
Los mismos dieron sus frutos, ya que a partir de ese momento, el trámite del juego fue palo a palo. En ofensiva respondió Anzorena con la presencia del capitán del equipo, el “Hacha” Sánchez, quien anotó 8 puntos en forma consecutiva. De esta manera se fue el primer parcial y el dueño de casa sacó una diferencia de 7 puntos: 25-18. En el inicio del segundo capítulo, Rory Spencer golpeó con una bomba de 6.75 y Anzorena se puso en juego nuevamente, pero apareció toda la paciencia ofensiva del equipo de Castiñeira y con una juego en ataque que tuvo como premisa pasar el balón como mínimo siete veces, generó los espacios necesarios, para que sus jugadores tuvieran lanzamientos muy cómodos. Por ello, Matías Cuello se destacó con cuatro conversiones de cuatro intentos de la línea de tres puntos.
Infernal. Más allá de la efectividad de Ferro, el quinteto de la Sexta no bajó su ritmo ofensivo y respondió cada golpe con una conversión, por esta razón el parcial terminó igualado en 22 puntos y se fueron al descanso largo: 47-40, los siete puntos de diferencia a favor del local, esos mismos que había sacado en el inicio del juego.
Tras el descanso largo, Anzorena sufrió nuevamente por su desconcentración. Parcial de 5-0 para Ferro y otra vez a correr desde muy atrás. Pero, reaccionó el quinteto de Figueredo ya que se puso a cinco puntos (57-52) cuando restaban cinco minutos. Pero, apareció toda la jerarquía de Ferro y apabulló a un elenco de Anzorena que no tuvo reacción. Parcial de 17-3 e historia sellada. Anzorena no levanta cabeza.
