Durante la tercera jornada de la cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en Washington, la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, mostró su descontento por la tardanza del presidente estadounidense, Joe Biden, y del secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg.
Mientras conversaba con el presidente finlandés, Alexander Stubb, una cámara captó a Meloni torciendo los ojos y señalando su muñeca, en un intento de mostrar la hora, a pesar de no llevar reloj.
A las 10 de la mañana, el inicio de la sesión se retrasó debido a la ausencia de Biden y Stoltenberg. En ese momento, un asistente sacó su teléfono para verificar la hora, lo que llevó a Meloni a expresar nuevamente su frustración antes de darse cuenta de que estaba siendo grabada.
Durante la cumbre, los líderes de la OTAN discutieron una estrategia “a prueba de Donald Trump” para continuar brindando apoyo a Ucrania y fortalecer la institución ante la posible reelección del expresidente en las elecciones de noviembre.