El presidente Mauricio Macri anunció ayer que su Gobierno pagará una suma fija extra de 400 pesos antes de fin de año a los beneficiarios de las asignaciones universales por Hijo (AUH) y por Embarazo (AUE) y a los jubilados y pensionados que cobran el ingreso mínimo, pero confirmó que no habrá pago alguno de un bono de fin de año para los trabajadores asalariados como lo reclaman las centrales sindicales.
Macri hizo el anuncio después de admitir la inflación de las últimas semanas: “Hemos notado que hemos tenido algunos deslizamientos de algunos precios de la canasta básica”, dijo al fundamentar esa asistencia. El Presidente lo hizo en su primera conferencia de prensa en la Casa Rosada, a su regreso de la cumbre del Mercosur, en Paraguay, acompañado por la vicepresidenta Gabriela Michetti, y la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley. Al respecto, agregó que su gobierno “ha heredado una inflación que el Gobierno anterior se preocupó más en ocultar que en resolver”, y que le “ha hecho mucho daño a los que menos tienen”.
El pago de los 400 pesos para “ayuda para la canasta navideña”, dijo Macri, se hará efectivo recién la semana que viene y beneficiará a un total de unos 8 millones de personas entre: los que reciben las AUH y las AUE, que desde setiembre pasado son de 837 pesos, más los jubilados y pensionados que cobran el sueldo mínimo, en sus casos de 4.299 pesos. El “costo fiscal” será de 3.300 millones de pesos.
En cambio el Presidente confirmó lo que ya habían adelantado sus ministros de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay, y de Trabajo, Jorge Triaca: no habrá un bono de fin de año compensatorio de la inflación, como insisten en reclamarlo los tres sectores en que está dividida la CGT, al igual que los dos de la CTA.
“El Gobierno nacional no está en condiciones debido a la situación económica y financiera heredada de pagar un bono navideño”, afirmó Macri, preguntado sobre un pago de ese tipo para los empleados estatales agrupados en los sindicatos Upcn y ATE. Y agregó respecto del sector privado que “ello dependerá de la situación de cada empresa”; o sea, lo dejó librado a una eventual negociación sectorial.
Después de manifestarse “muy optimista” por los efectos del levantamiento del cepo cambiario, Macri sostuvo respecto de los mecanismos de los que dispone su Gobierno para controlar el aumento de los precios: “Si no vemos un acompañamiento (de los empresarios) como el que necesitamos para recorrer esta transición, recurriremos a abrir la importación y a traer oferta adicional que corrija los precios”.
Insistió además en que su “gran preocupación es ahora abocarnos a bajar la inflación” por lo que “es importante el diálogo entre el gobierno, los trabajadores y las empresas, y ver cómo recorremos el camino en forma responsable”.
En ese sentido dijo esperar concretar la reunión por el denominado “pacto social”, con empresarios y sindicalistas, y subrayó: “Tenemos que sentarnos entre todos y hacer que la Argentina vuelva a crecer. Los problemas que hoy parecen enormes parecerán más chiquitos. El problema es bajar la inflación para en 2017 tener un solo dígito”. Así descartó que pueda haber conflictividad ante la negativa a otorgar un bono de fin de año.
El propio Macri le confirmó después a este diario que para empezar a avanzar en ese “pacto social” en enero se hará el primer encuentro tripartito, de cara al inicio de las paritarias, dos meses más tarde.
Camioneros consiguió un plus de hasta 12 mil pesos
El jefe de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, consiguió ayer un bono de fin de año para el sindicato de camioneros que va de los 5.200 a los 12.000 pesos, de acuerdo a las categorías, mientras que otros sindicatos se encolumnaron también en busca de un plus salarial y desde el Gobierno se analiza el mapa de los reclamos.
El secretario general adjunto de los camioneros, Pablo Moyano, hizo el anuncio tras el acuerdo arribado con los representantes de las empresas del autotransporte de carga en una reunión celebrada en el Ministerio de Trabajo.
En tanto, el titular de la CGT Alsina, Antonio Caló, pidió al Gobierno que los convoque “esta semana” para discutir un bono de fin de año, mientras que los jefes de la CTA, Hugo Yasky, y de la CTA autónoma, Pablo Micheli, como el barrionuevista Carlos Acuña también se plegaron a la demanda.
Si bien el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, desestimó la semana pasada la posibilidad de establecer por “decreto” un plus salarial para fin de año, parece que la medida podría ser revisada y desde el Gobierno analizan distintas alternativas.
Lo cierto es que el acuerdo cerrado por los camioneros alienta el reclamo a favor del bono pedido por la CGT Azopardo de 5.000 pesos para recuperar el poder adquisitivo.
La cifra coincide con lo solicitado por Antonio Caló, quien fue contundente al remarcar que “si el Gobierno tiene intención de sentarse con las distintas centrales, nos tenemos que sentar esta semana, porque las fiestas son ahora, y a la gente no le alcanza la plata”. Agencia DyN
Protocolo para protestas
El presidente Mauricio Macri confirmó ayer que “en enero” próximo presentará el protocolo para las protestas sociales y afirmó que el gobierno nacional “está abierto al diálogo”.
“Estamos trabajando en el protocolo para las protestas, en enero lo vamos a presentar”, dijo Macri en una conferencia de prensa en Casa Rosada y agregó que “el gobierno está abierto al diálogo con todos los sectores”.
En ese sentido, señaló que el bloqueo del tránsito “no tiene que ver con el diálogo, tiene que ver con la prepotencia, hay que reducir el nivel de conflictividad”.
