Anunciado faltazo de Comperatore

Mucha expectativa había generado la posible visita de Leonardo Comperatore, a la Legislatura, pero ya avisó que no concurrirá a la reunión de la Bicameral de Seguridad tal como en principio se había acordado. El gran tema de agenda para el cónclave legislativo entonces será la elección de autoridades de la comisión y luego empezar a puntear el listado de iniciativas que serán parte del paquete de leyes que anunció el domingo de la semana pasada el vicegobernador, Carlos Ciurca.

Entre el paquete de leyes está la declaración de emergencia en seguridad que tantas veces reclamó Ciurca y que el gobernador Francisco Pérez intentó por todos los medios relativizar y evitar.

El radicalismo apuraba la presencia del ministro para conocer el plan que pretendía implementar en la urgencia y, de paso, que indicara qué leyes de todo el paquete pretendía y podía aplicar en función de los recursos disponibles. Según dicen en las usinas del oficialismo para justificar el faltazo, el ministro está realizando tareas inherentes a su cargo en el Sur de la provincia.

Pero desde la oposición advierten que en las últimas horas el panorama en seguridad se ensombreció con dos hechos y creen que el oficialismo intenta "cuidar" al ministro. Por un lado, la desaparición del chico de 14 años Daniel Argüello, hijo de un testigo protegido, un caso que ha tenido cobertura mediática nacional. Hace una semana que el adolescente no aparece y la madre habla desconsolada pidiendo que vuelva.

El otro caso es la muerte del empresario de Guaymallén, José Giménez, ocurrida el lunes, después de dos semanas internado luchando por su vida. Giménez fue baleado en la puerta de su casa el 20 de abril pasado.

Estos dos casos han vuelto a agitar el debate por la seguridad y el radicalismo ya había anunciado el interrogatorio al ministro. Pero además la presencia de Comperatore era un atractivo adicional para que la prensa se convocara y los micrófonos amplificaran las críticas y las explicaciones que diera el ministro.

Así es que la especulación opositora tiene al menos verosimilitud. En este escenario no era conveniente que el ministro se mostrara en la Legislatura, sobre todo cuando ya venía golpeado por el asesinato del turista neocelandés en el parque General San Martín y el costo que le causó su presencia en la marcha de los deportistas que usan el parque para sus actividades el sábado 3 de mayo.

En las especulaciones hay quienes señalan que Comperatore no está muy a gusto en el cargo y hay quienes aseguran que amagó con renunciar después del episodio en la puerta del Club Mendoza de Regatas. Por eso Ciurca salió a pedir el tratamiento de la emergencia en seguridad y tal parece que los tres proyectos de ley para declarar esa instancia serían discutidos, tratados y uno de ellos aprobado.

La decisión es ir hasta el final. Sostener la discusión en la Legislatura, circunscribirla a ese ámbito y sólo a los efectos de hablar de nueva legislación. La oposición, por el contrario, pretende enfocarse en una gestión del Ministerio de Seguridad que considera deficiente y pretende forzar medidas para mejorar el accionar policial.

Por lo pronto, tal como adelantara Los Andes el 8 de mayo pasado, el oficialismo pretende impulsar en la presidencia de la comisión bicameral al diputado demócrata Jesús Riesco, mientras que el radicalismo impulsa al diputado Héctor Quevedo. La presidencia de la bicameral corresponde a la oposición y alternativamente cae en manos de un senador o un diputado; el año pasado le correspondió a la senadora radical Milagros Suárez, este año le toca a un diputado y en ese esquema Riesco resulta más conveniente para el oficialismo.

La comisión será conformada por los senadores Claudia Torres (FpV), Milagros Suárez (UCR), Gustavo Valls (Frente Renovador), Gustavo Cairo (Pro) y Néstor Márquez; y por los diputados Claudio Díaz (FpV), Daniel Cassia (Frente Renovador) y los ya mencionados Quevedo y Riesco. Con esta conformación, el oficialismo espera imponer el nombre de Riesco con los votos de sus dos representantes, más el de Cassia, el de Márquez y el de Valls.