El Gobierno provincial planea licitar 12 áreas petroleras en no más de 60 días. Diez de esas doce compulsas serán para que empresas petroleras compitan por la exploración; las dos restantes serán para explotación.
El listado
Las dos zonas que el Ejecutivo quiere concesionar para explotación tienen historia: ambas fueron concesionadas en 1991 y recientemente han vuelto a control de la provincia. Una es Puesto Pozo Cercado Occidental (Tunuyán), que había sido concesionada en 1991 junto a Chañares Herrados y que fueron divididas hace pocos meses; la otra es Atuel Norte (entre San Rafael y Malargüe), que fue devuelta por Tecpetrol luego de 25 años de extracción.
Las áreas nuevas son Río Diamante en San Rafael, CN III Norte (parte en San Rafael y parte en Malargüe); en Malargüe se ubican Boleadero, Loma Cortaderal, Cerro Doña Juana, Ranquil Norte, CN VII-A, Chachahuén Oeste y Loma del Divisadero; en Tunuyán: Puesto Pozo Cercado Oriental.
Una aclaración. Puesto Pozo Cercado era una sola área; ahora fue dividida en dos; la oriental nunca entró en producción, a pesar de haber sido concesionada en 1991. Por eso ahora será incluida en la licitación para exploración. La zona occidental sí contiene algunos pozos y tiene reservas comprobadas. Ésa será licitada para extraer petróleo.
Regalías y plazos
Hasta ahora lo que está definido es que se establecerá un porcentaje fijo de regalías, que estaría en torno al 12%. “En la evaluación de las ofertas va a pesar mucho más el monto a invertir que las regalías. Es probable que no permitamos a los oferentes prometer regalías mayores que las que estamos definiendo. Lo que queremos es que el esfuerzo se haga en las inversiones de exploración y aumentar la producción de petróleo en la provincia” explicaba el subsecretario de Energía y Minería, Emilio Guiñazú.
Es por esa falta de inversiones que Puesto Pozo Cercado Oriental se licita para exploración, porque nunca tuvo desarrollo a pesar de los compromisos asumidos en1991 y en 2011.
Las dos áreas para explotación serán concesionadas por 25 años, plazo que está fijado por la normativa vigente. En el caso de las diez áreas para exploración, el plazo de trabajo puede estirarse a cinco años y, luego, se daría a la empresa la posibilidad de explotarlas, en caso de que encuentren yacimientos nuevos.
En ese caso, las condiciones de explotación quedarían fijadas desde ahora, es decir, 12% de regalías y 25 años de plazo de explotación.
Además, el Gobierno estudia la posibilidad de establecer como condición que, en caso de que el precio del barril de petróleo suba por encima de 65 dólares, se subiría algunos puntos el porcentaje de regalías; en caso de que el barril subiera por encima de los 75 dólares, entonces se establecería una escala de suba del porcentaje de regalías: "En caso de renta extraordinaria, queremos participar" indicó Guiñazú.
Otro detalle de la futura licitación es que se pretende hacer exploración de petróleo convencional y no convencional. Además, una buena parte de las áreas que serán licitadas están ubicadas en la cuenca neuquina, por lo que es probable que haya formaciones de lo que se conoce como Vaca Muerta. “Queremos tener información geológica de las áreas nuevas” explicaba Guiñazú.
Un detalle adicional es que el Gobierno pretende replicar la negociación que hiciera el Ejecutivo nacional para empujar la explotación petrolera de Vaca Muerta en la provincia de Neuquén. Esto es, sentar a las empresas con los gremios, para fijar condiciones laborales menos onerosas para las empresas y, de esa manera, promocionar la generación de los puestos de trabajo.
Actualmente el Gobierno redacta el borrador del pliego de licitación. En un par de semanas estará dando vista a empresas petroleras para que hagan sugerencias.
Probablemente en 45 ó 60 días el Gobierno estaría publicando el llamado.
Se busca evitar las "promesas vacías"
El funcionario sabe que en el porcentaje previsto de regalías habrá cuestionamientos, sobre todo porque en otras oportunidades se han firmado concesiones por participaciones mayores para el Estado. Por eso insiste en el concepto: "Más regalías es una promesa vacía porque hasta que no sepan lo que hay y cuánto va a costar sacarlo, no se puede hacer la evaluación económica del proyecto. Hemos visto que cada vez que se han prometido regalías por encima de las básicas, empiezan los pedidos de baja porque la ecuación no da".
Otra definición fuerte respecto de la futura licitación es que Emesa no será parte de la compulsa, a diferencia de las últimas concesiones, en las que la empresa de energía mendocina era incluida con una participación en las utilidades de la explotación. “Las inversiones son 100% de las petroleras, tanto en el riesgo, como en el resultado. No vamos a permitir ofertas adicionales porque pretendemos que todo el esfuerzo económico vaya al desarrollo del área”.
Estas dos decisiones tienen un antecedente polémico y está vinculado a las áreas revertidas por el actual gobierno, particularmente una que fue muy polémica: la ya mencionada Puesto Pozo Cercado.
Esta área había sido concesionada junto a Chañares Herrados en 1991 hasta 2017. En 2011, antes de que culminara el gobierno de Celso Jaque, la concesión fue prorrogada por diez años más. Pero las inversiones comprometidas para esa prórroga no fueron cumplidas nunca. En el medio, la empresa concesionaria, Chañares Herrados SA, fue vendida a Medanito. Esta última fue negociando condiciones para mantener parte del área.
Es así que la actual Administración decidió revertir una parte de la concesión, dejando la zona de Chañares Herrados en manos de la empresa concesionaria, puesto que allí se habían realizado parte de las inversiones comprometidas.