La Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) dispone de una prestación por desempleo para trabajadores en relación de dependencia que hayan sido despedidos sin causa justa, por finalización de contrato o por otras causas externas al trabajador (Ley de Contrato de Trabajo N.º 24.013)
Se trata de un monto que se calcula dependiendo de los ingresos y meses trabajados (con aportes) durante los últimos tres años. El pago se realiza en cuotas y tiene una duración de entre 2 y 12 meses, aunque para los trabajadores que tengan más de 45 años la presatación se extiende hasta los 18 meses, es decir durante un año y medio.
En todos los casos, el beneficio se cobra hasta alcanzar los plazos máximos, o hasta que el trabajador vuelva a conseguir empleo (deberá darle de baja a la prestación antes de los 5 días de iniciado el nuevo trabajo).
Cuánto se cobra
De acuerdo con la ley Argentina “el tiempo total de prestación estará en relación al período de cotización dentro de los tres (3) años anteriores al cese del contrato de trabajo que dio origen a la situación legal de desempleo con arreglo a la siguiente escala":
Período de Cotización
De 12 a 23 meses/ 4 meses
De 24 a 35 meses/ 8 meses
De 36 meses/ 12 meses.
En ningún caso la prestación mensual podrá ser inferior al mínimo ni superior al máximo que a ese fin determine el mismo Consejo.
Sobre el trámite
El trabajador deberá sacar turno dentro de los 90 días hábiles desde la fecha en que se produjo el despido o finalización del trabajo. Después de ese plazo, por cada día hábil transcurrido se le descontará un día de prestación.
Requisitos para recibir la bonificación
Para recibir el beneficio de ANSES hay que:
– Tener más de 18 años
– Tener CUIL definitivo (otorgado por ANSES)
– No recibir dinero desde el sector privado (en blanco)
– No recibir dinero por parte del estado (Anses)
- Si hubo intercambio de telegramas con tu empleador, deberás presentar también los telegramas
-La constancia del Ministerio de Trabajo.
Sacar turno
Solicitá turno dentro de los 90 días hábiles desde la fecha que se produjo el despido o finalización del trabajo. Después de ese plazo, por cada día hábil transcurrido se descontará 1 día de prestación.