El mendocino Pascual Pérez, el primer campeón mundial de boxeo que tuvo Argentina y reconocido como uno de los mejores mosca de la historia, murió en Buenos Aires el 22 de enero de 1977. El popular “Pascualito” había nacido el 4 de marzo de 1926 en el Valle de Tupungato, y sintió atracción por calzarse los guantes y así comenzó su carrera como amateur, apenas superada la pubertad.
Ya en 1948, cuando era común designarlo bajo los apelativos ‘El Pequeño Gigante’ o ‘El León mendocino’, Pérez alcanzó una de sus mayores proezas como boxeador. En los Juegos Olímpicos de Londres, consiguió la medalla de oro en la división mosca, con apenas 48 kilogramos y por ese logro el gobierno del General Juan Domingo Perón le otorgó una casa en Mendoza y un trabajo en una repartición pública.
Debutó como profesional una vez que ya había cumplido 125 peleas como amateur. Y lo hizo en noviembre de 1952. Dos años más tarde, el 26 de noviembre de 1954, Pérez entró en la historia al obtener el campeonato mundial tras vencer por puntos al japonés Yoshio Shirai, tras 15 rounds en el estadio Korakuen, en Tokio. De un atildado y prolijo estilo, fue el rey en su división por seis años (en 1960 perdió con el tailandés Pone Kingpetch).