Un cambio en el pelo es un sinónimo de renovación y, si se trata de pasar de una melena larga a corta, además de ganar impacto y comodidad, puede ser un adiós a algunos preconceptos de belleza.
"En América, el pelo era usado en ceremonias con fines de curación física y espiritual o en rituales sagrados. También era tomado como un símbolo de resistencia", explicó Oscar Fernández, director creativo de la peluquería Roho y uno de los defensores de este estilo a diario Clarín.
Amplió: "El corte de trenzas era una sanción a quien cometía un acto indebido, para que sintiera vergüenza, y que una mujer lo cortara por propia voluntad era entendido por la sociedad como un acto de desprecio a su cultura. Estos datos no son menores. Porque ¡cuánta importancia tienen las cabelleras largas en nuestra cultura! Y justamente eso lleva a estilos que no favorecen y a desaprovechar las virtudes que tiene el pelo corto".
Una de las consigas es que "el largo más extenso puede agregar años, verse antiguo o poco personal", dijo Fernández.
Las melenas reducidas, en cambio, pueden dar una imagen más personal y sofisticada.
También es bueno recalcar que se trata de una opción "versátil y, según la forma, resaltar y dar armonía a los rasgos. Otro punto para desmitificar es que es solo para mujeres grandes", completó por otra parte el reconocido estilista Javier Luna.
Influencia francesa
Los primeros cortes al ras famosos -llamado "garçonne", en Francia, y "flappers", en Estados Unidos- irrumpieron en la década del 20.
"Se convirtieron en una herramienta de las mujeres para reclamar su espacio en la sociedad, tras haber ocupado durante la Primera Guerra Mundial puestos que en general eran para hombres. No querían volver atrás y el cabello corto las plantaba de una nueva manera", resumió Fernández.
Volvieron en los '60, con el célebre estilista Vidal Sasson, y con el formato Pixie, se convirtieron en un clásico sexy.
Uno por uno los tips de estilo para llevar el pelo corto
* "Los bob, rectos y a la altura del maxilar ayudan a afinar los rasgos más marcados y son la primera opción para quienes están en el camino hacia este tipo de variantes. Por otro lado, los pixie, tipo varón, dan una imagen descontractura y más canchera", recomendó por su parte el estilista Hernán Vallejo.
* "La forma elegida por los estilistas no depende de la forma de rostro, sino de los rasgos que la mujer quiera destacar. El cabello corto resalta la belleza natural porque las facciones se tornan más visibles", subrayó Rafael Berttin, ID Artist de L'Oréal Professionnel.
* "Las luces y sombras en el color generan distintas profundidades y dan una estética más desestructurada", aportó Luna.
* "Un flequillo asimétrico permitirá armar el foco de atención deseado", dijo Berttin.
* El peinado, una clave para ganar variantes: "más chato, despeinado, para un lado, para el otro, son algunas de las alternativas fáciles de implementar", dijo Vallejo."Las ceras son una la opción para lograrlo. Ayudan a definir el estilo, agregan texturas y contrarrestan el frizz", comentó Berttin.
* "Animarse, probar, romper esquemas que detengan. El que no arriesga no gana y el pelo corto puede brindar una belleza inigualable", concluyó Fernández.