El desafío era más importante que sortear al rival de turno y volver a ubicarse en zona de Copa Libertadores. El mensaje subliminal que llevaba consigo el duelo tenía la carga de ser el primero sin la dupla goleadora del momento en la Superliga Argentina de Fútbol: Juan Garro y Santiago García. El funcionamiento del primer tiempo de Godoy Cruz fue un fiel reflejo de lo imprescindibles que es ese tándem ofensivo para este Tomba.
Lejos de resignarse a la superioridad que en los papeles ostenta un equipo que está en el sexto lugar en la tabla con el último, Arsenal salió a disputar la tenencia a Godoy Cruz. Para nada metió la cola atrás.
Todo lo contrario. Sus volantes fueron versátiles para desdoblarse y presionar sobre la salida. Con esa fórmula, el equipo del Huevo Rondina fue superior conceptual y tácticamente en los primeros 30 minutos. El problema del Arse fue la falta de profundidad porque, a excepción de ese zurdazo potente de Alanis que Burián mandó al córner a los 4', los de Sarandí fallaron en la sintonía fina de los últimos metros.
Godoy Cruz recién pudo salir de su campo a los 20 minutos. Fue con un zurdazo de Angileri que salió totalmente desviado. El trámite del partido, a esa altura, era ordinario. Sin llegar a ser convincente ni mucho menos, lo mejor del equipo de Dabove se exhibió en los últimos diez minutos de la etapa inicial.
En ese lapso, el Expreso tuvo cuatro aproximaciones como para irse al descanso con el 1-0. Pero el derechazo de Elías le tiró vientito al palo derecho y después el bueno de Santillo le ahogó el grito en un tiro libre a Pol y otro cabezazo a Viera. En la última jugada del primer tiempo, Lencinas ejecutó el córner con mucha rosca, Ramis se elevó con Curado y fue el '2' de Arsenal quien cabeceó contra su arco; el balón pegó en el ángulo y salió.
Jugando mal y todo, Godoy Cruz pudo irse al descanso en ventaja. Sin embargo, tenía que mejorar para el segundo tiempo. Pero el complemento fue un calco del comienzo del partido: Arsenal tuvo el control de la pelota y al Tomba le costaba horrores arrebatarle el esférico. Chaves giró fuera del área y levantó el remate y el mismo '9' uruguayo de la visita casi convierte de carambola después de un rechazo de Viera.
Pero el Tomba tiene un ángel que lo protege. El Ángel de la guarda: se llama Ángel González y ayer apareció en el momento justo y en el lugar indicado para poner el 1-0 que le dio la victoria a Godoy Cruz.
En el momento más complicado de la tarde-noche, el '8' de los goles importantes apareció en el hábitat del Morro García para empujar un centro-puñalada de Abecasis. Gol y a otra cosa. A cerrarle espacios al adversario y salir de contragolpe. Tras el gol, el Tomba se tranquilizó y hasta pudo haber ampliado la ventaja, pero el propio González la adelantó y permitió el achique de Santillo cuando se iba solito para sentenciar el pleito.
Ganó el Tomba y ésa es la mejor noticia. En lo futbolístico, quedó en deuda. Pero para eso todavía tiene tiempo. Lo más importante es que superó el desafío del mal de ausencias clave y sus hinchas empiezan a ilusionarse con renovar el pasaporte para 2019.
