Anécdotas del Gran Maestro

Anécdotas del Gran Maestro

FAMILIA: Juan Pablo Mahnic tiene 63 años de edad, está casado con Clara Chaar y es padre de Pablo David (26) que es Lic. en Economía y también remero y de María Cecilia (19) estudiante universitaria y jugadora de hockey sobre césped en el club Marista. Además es Contador Público Nacional egresado hace 35 años de la Universidad del Aconcagua.

MARTILLO:  En el 2000 participó en el Campeonato Mundial de Remo Bajo Techo que se desarrolló en Bostón, Estados Unidos, y donde tomaron parte 2.500 remeros de todas  las categorías. Le correspondió la correspondiente a los 50-59 años entre 104 inscriptos. Cada integrante  llevó un remo-ergómetro equipado con un pequeño monitor que les informaba sobre su ubicación durante la regata. Mahnic en una notable demostración de sus condiciones ocupó el 11mo. Puesto.

COLECCIONISTA:  Cuenta que de niño coleccionaba la revista El Gráfico, que leía y reeleía  sus notas y que admiraba todas sus tapas. Soñaba aparecer en sus páginas y  de grande ese sueño se hizo realidad porque apareció varias veces en distintas ediciones de la tradicional Regata Internacional Vendimia. Incluso comenta que conoció y trató personalmente al especialista de remo de esa publicación, José Francisco Villa, "el Negro Villa" como se lo conocía en el ambiente del periodismo, y que firmaba sus artículos bajo el seudónimo de Banda-Bow.

APLAUSOS: "Salieron de Mendoza, los aplaudió el mundo"  fue el llamativo título de la cobertura periodística  en que la revista El Gráfico destacó aquel cuarto puesto del  dos largos  con timonel integrado por Sergio Pedernera,  Pedro Capredoni y Gabriel Modarelli y  dirigido por Juan Pablo Mahnic en el Mundial Juvenil de Piediluco, Italia, en 1982.

ELOGIOS: Los hermanos Guillermo Oscar y Sergio  Pedernera han tenido siempre sinceras palabras de elogio para "el Maestro Mahnic" como lo califican: "siempre se preocupó para que los jóvenes que practicábamos remo en el club Mendoza de Regatas nos sintiéramos cómodos con su trabajo. Como a todos nos preparó a conciencia, sin descuidar ningún detalle,  corrigiendo nuestros defectos y mejorando nuestro estilo. Le estamos muy agradecidos por sus buenos consejos y porque nos demostró que el remo abre puertas, nunca las cierra, como  nos hacía ver en nuestra época de aprendizaje".

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