Las esperanzas de Andes Talleres de llegar a la final de la Copa Intercontinental de clubes de hockey sobre patines se diluyeron en una ráfaga. El equipo mendocino, dirigido por Marcelo Innella, jugó en gran forma pero no logró doblegar al Benfica; los lusitanos se impusieron por 7 a 4 en el partido que abrió la rueda de semifinales.
En el estadio Olímpico, que fue testigo de la coronación argentina en los Juegos de Barcelona 1992, el equipo de calle Minuzzi dio cuentas claras de estar a la altura de las circunstancias. A los 3’, Exequiel Tamborindegui marcó el primer tanto del partido burlando los reflejos del multicampeón mundial Guillem Trabal y puso a los Matadores en ventaja.
El Azulgrana, que ingresó con Rodrigo Fernández, E. Tamborindegui, Carlos López, Matías Fernández y Julián Tamborindegui, tres minutos más tarde de su conversión se vio sorprendido por la conquista de Miguel Rocha y el empate en un gol.
Frente al equipo, que constituye la columna vertebral de la selección portuguesa, Andes Talleres se mostró activo y desplegó un juego franco. El sanjuanino Carlos Nicolía (a los 7’ y 10’) ponía al frente en el marcador a los europeos. El Matador respondió con todas sus armas, a los 17’, el delantero Juan Cruz Fontán (que arrancó en el banco) le dio aire a la esperanza de los mendocinos con una una nueva conquista.
Sobre el final del primer tiempo, Joao Rodrigues marcó el cuarto tanto de las águilas y esta ventaja volvió a ser achicada por Exequiel
Tamborindegui para cerrar un parcial de 4 a 3 en favor de los lusitanos.
En el segundo tiempo, fiel a su estilo, el campeón sudamericano de 2016 buscó desplegar su velocidad, inmersos en un juego frenético nuevamente Nicolía con una ráfaga goleadora (7’ y 8’) aplazaba las pretensiones de los cuyanos a un juego a todo o nada. El talento del delantero de la Selección nacional, campeón mundial en 2015, era el argumento de peso ofensivo cada vez que las águilas rondaban el arco defendido por Rodrigo Fernández.
Carlos López, a los 8’, pondría las cuentas (5 a 4) y sostenía la ilusión de los sudamericanos. Diogo Rafael, que que sacudió la red a los 11’ y 16’, sentenciaría el marcador. Benfica festejó una victoria trabajada, mientras que Talleres salió de la pista con la seguridad de haber entregado todo. El Matador mostró todos sus pergaminos.
El Reus Deportiu sufrió para llegar a la final
Reus Deportiu y SL Benfica se enfrentarán en la gran final de la Copa Intercontinental de hockey sobre patines, que se celebra en el Pabellón Olímpico de Reus. El local, que derrotó a Concepción (7-5), en el mismo escenario que albergó los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992 dirimirá cual es el mejor club del planeta.
En el desarrollo del partido, que se definió en la prórroga, el quinteto español se vio sorprendido por los tres tantos sanjuaninos. Los goles de David Páez, Martín Maturano y Mauro Giuliani pusieron el marcador (3 a 0) en favor de los argentino pisando el final del primer tiempo. Pero con el tiro directo ejecutado por Raúl Marín los anfitriones abrieron el marcador e insinuaron entrar en el partido.
En el segundo tiempo, Marc Torra achicó las cuentas para los españoles y nuevamente Giulani estiró la brecha en favor del quinteto de Pueblo Viejo. en parido era tan intenso como parejo, pero dos genialidades de Álex Rodríguez, a tres minutos para el final, sentenciaron la resolución del juego en tiempo extra.
Allí, Reus pasó al frente por primera vez, gracias a una conquista de libre directo de Marín (que también anotó el último gol del partido) y un remate de Joan Salvat.