Las elecciones del domingo dejaron varias sorpresas, la mayoría a nivel nacional y muchas reflexiones dentro y fuera de los partidos políticos. Además, dejó novedades como la primera gobernadora mujer en la historia de la provincia de Buenos Aires. En Mendoza, también hubo algunos datos que llaman la atención. Uno es, por ejemplo, que a la Cámara de Senadores de la Nación llegarán a representar a Mendoza dos mujeres juntas y que a su vez comparten, entre sus tantas diferencias, que son muy jóvenes. Se trata de Anabel Fernández Sagasti, que será la senadora más joven por Mendoza desde 1983, y Pamela Verasay, la radical que por pocos años no comparte el podio.
La historia indica que para la Cámara alta los mendocinos hemos preferido hombres y mayores a los 40 años. Algunos de los que nos representaron fueron, por ejemplo, Celso Jaque (PJ), José Octavio Bordón (PJ), Marita Perceval (PJ) y José Genoud (UCR), Margarita Malharro de Torres (UCR), entre otros como Ernesto Sanz (UCR), Laura Montero (UCR) y Adolfo Bermejo (PJ) que se retiran a fin de año.
Según el artículo 55 de la Constitución Nacional, son requisitos para ser elegido senador haber sido seis años ciudadano de la Nación y ser natural de la provincia que lo elija, o con dos años de residencia inmediata en ella y tener la edad de 30 años. Fernández Sagasti tiene uno más de lo necesario.
La historia indica que para la Cámara Alta los mendocinos hemos preferido hombres y mayores a los 40 años.
Referente de La Cámpora en Mendoza, 31 años y abogada
Sagasti pasó de la militancia llana a jugar en primera hace 4 años, cuando fue designada por la presidenta Cristina Kirchner para secundar a Guillermo Carmona como candidata a diputada nacional en la lista del PJ mendocino en 2011. Su nombramiento causó sorpresa y polémica, cuando para muchos era una total desconocida, incluso dentro de su partido. También fue noticia por sus escasas declaraciones, en sintonía con los militantes camporistas, que luego revisaron su política comunicacional y se abrieron a los medios.
Este año, afianzada dentro del núcleo K del Congreso (para muchos es la mendocina preferida de Cristina), encabezó la lista de senadores consiguiendo la única banca que pudo obtener el peronismo local en la Cámara alta.
El frente Cambiemos también apostó a la juventud y mal no le fue
La diputada provincial Pamela Verasay consiguió una de las tres bancas en juego. Contadora y de 35 años, ha militado en la UCR desde joven. Compatirá bancada con Julio Cobos, el otro senador electo el domingo.
Con Fernández Sagasti es poco o nada lo que las une politicamente, pero ahora las vincula el hecho de ser las políticas mendocinas más jóvenes en ocupar una banca en el Senado de la Nación desde el retorno a la democracia.