Los trabajadores de Salud retomaron ayer sus medidas de fuerza de cada semana para reclamar al Gobierno mejores condiciones laborales.
Mientras el sector realiza asambleas en hospitales y centros de salud, un grupo se trasladó a Casa de Gobierno para intentar hablar con funcionario de las carteras de Salud, Hacienda o Gobierno.
Ante la falta de respuesta, se dirigieron hasta la puerta de la casa del ministro Marcelo Costa, en el barrio Arizu de Godoy Cruz, donde realizaron un escrache que incluyó pegatinas en el exterior de la vivienda.
Así, a media mañana de ayer, el pedido -encabezando por los gremios ATE y Ampros- se instaló en el edificio gubernamental. Varios representantes de los gremios ocuparon primero el primer piso y luego el quinto para exigir una reunión con funcionarios del Ejecutivo.
Luego de un tiempo, salió a recibirlos Mauricio Guzmán, miembro paritario provincial, quien les explicó que el ámbito para dialogar es dentro de las paritarias. "Lo cierto es que el Gobierno ha suspendido las paritarias y muestra indiferencia a nuestros reclamos de larga data", explicó Claudia Iturbe, secretaria gremial de Ampros.
Los trabajadores hicieron una asamblea en la esquina de las calles Mitre y Pedro Molina, de ciudad, donde decidieron movilizarse hasta la casa del ministro Costa. Allí dejaron carteles con la leyenda "Mienten", "No cumplen". Posteriormente, llegó la policía para dar protección y evitar inconvenientes.
"Primero fuimos al quinto piso, donde trabaja el ministro de Salud, pero se encuentra en Malargüe. Después reclamamos una reunión con el ministro de Gobierno, pero no quisieron recibirnos. Tendremos que avanzar en la planificación de un plan de lucha más riguroso, porque el Gobierno no quiere darnos una respuesta", explicó Raquel Blas, titular de ATE.
El sector reclama, entre otras cosas, la equiparación de las asignaciones familiares con las que abona la Nación, una compensación por los descuentos del Impuesto a las Ganancias, el nombramiento de los contratados y el pase a planta de los trabajadores conforme a un cronograma establecido en paritarias anteriores.
La mayoría de los especialistas estuvo atendiendo y se mantuvieron las guardias, las cirugías programadas y los servicios esenciales. Aunque al igual que ocurre todos los martes y jueves, los trabajadores de la Salud adelantaron que podrían producirse demoras en la atención por la realización de las asambleas.