Hay novedades en el caso que cumple 25 años. Estados Unidos acusó formalmente este viernes a Salman Raouf Salman, un líder del movimiento chiíta libanés Hezbollah, de ser el autor intelectual del atentado de 1994 contra la mutual judía AMIA en Buenos Aires, que mató a 85 personas.
El Gobierno de Donald Trump ofreció una recompensa de hasta siete millones de dólares por cualquier información que lleve al arresto de Salman, confirmaron las agencias Europa Press y AFP.
Asimismo, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha emitido sanciones contra Salman por "coordinar este devastador ataque" y dirigir, desde entonces, "operaciones terroristas para Hezbollah en el hemisferio occidental", aseguró la subsecretaria del Departamento del Tesoro para Terrorismo e Inteligencia Financieras, Sigal Mandelker.
Estas medidas congelan cualquier activo de Salman y le prohíben realizar transacciones en el sistema financiero estadounidense en su nombre o en el de Hezbollah, confirmaron oficialmente.
Salman, de nacionalidad colombiana y también conocido bajo el alias de "Samuel Salman El Reda", es uno de los fugitivos más buscados por Interpol bajo los cargos de "homicidio con agravante de odio racial o religioso".
Durante tres décadas ha conseguido esconderse entre Líbano y América Latina. Posee múltiples refugios, variadas identidades y tejió una red de contactos lo suficientemente amplia como para evadir la prisión y armar una estructura de lavado de activos y tráfico de cocaína a su país y desde allí a Europa y Oriente Próximo.