Hace dos años, la inquietud que las movilizaba comenzó a transformarse en una alternativa de cambio. Investigaron, buscaron las herramientas y, con el firme objetivo de generar conciencia vial entre sus pares, diseñaron un plan que ya cuenta con la aceptación de decenas de estudiantes, docentes y directivos de diferentes escuelas.
Así, meses atrás, Anabella Spinelli, Romina Monterroza, Martina Triviño y Florencia Gaspari (todas alumnas de tercer año del Colegio Universitario Central), terminaron de delinear las últimas etapas de su proyecto y organizaron charlas y talleres con los que interpelan directamente a los jóvenes de su misma edad.
Consciente de que los siniestros viales se configuran como la causa más recurrente de muerte e invalidez entre los jóvenes mendocinos, Martina (16) sintetiza los argumentos que la llevaron a programar la actividad. Asegura que el objetivo de transmitir su mensaje a los colegios de la provincia consiste en que los adolescentes estén prevenidos y comprendan la responsabilidad que implica manejar un auto, para así actuar en consecuencia al salir a la calle.
Para organizar charlas más dinámicas, el grupo contó con la ayuda del papá de Martina, Pablo Triviño, quien les habilitó un software que permite a quien se suma a la experiencia, simular el momento del manejo de una manera más realista. Así, quien se posiciona frente a la pantalla del simulador -tal como funcionan los juegos interactivos- tiene la posibilidad de vivenciar la conducción en una ruta.
Allí, el/la participante debe avanzar por una ruta por la que circulan camiones, autos, peatones y hay señales de tránsito a las cuales respetar. Sobre un costado del visor, aparece una lista donde se contabilizan todas las faltas de tránsito y al final, el conductor cuenta con un puntaje.
Pero esto no es todo. Antes de experimentar cómo es subirse a un auto virtual, los asistentes al taller reciben una charla explicativa asentada sobre cuatro ejes: señalización, consecuencias fatales de los siniestros viales, influencia negativa del consumo problemático y medidas de seguridad.
Para eso, el grupo de capacitadoras se dividió el trabajo por temática y para cada una diseñó diferentes elementos que hacen más entretenida la actividad. Se integran así juegos de memoria, videos, personajes (como el “monstruo y el superhéroe”, que representan actitudes positivas y negativas al manejar) y explicaciones didácticas relativas a las medidas de seguridad que no pueden faltar, como usar el cinturón de seguridad, no hablar por celular y no consumir bebidas alcohólicas ni drogas. Todo el material ha sido acompañado de un manual instructivo con mensajes preventivos.
Desde que la iniciativa fue presentada en setiembre en el Parque Estación Benegas (Godoy Cruz) hasta ahora, los resultados -según comentaron las estudiantes- han sido muy positivos y de hecho ya lograron llevar los simuladores virtuales al Icei y a la Arquitecto Carlos Thays; todo con el aval de la Dirección General de Escuelas (DGE).
Al mismo tiempo, el sitio de Facebook que aparece con el nombre “Simuladores de Conducción Virtuales”, cuenta cada vez con más seguidores y visitantes, interesados en los mensajes y experiencias.
Martina, en coincidencia con su amiga y compañera de curso Romina, destacó que la respuesta de los alumnos frente a las charlas ha sido muy positiva. Ambas remarcaron que el hecho de que alguien de su misma edad busque concientizarlos es un punto que les ha jugado a favor. “Los chicos y chicas que han recibido las charlas han demostrado interés, nos han preguntado y también reflexionaron bastante”, aseguró Romina.
En ese sentido, las adolescentes marcaron la diferencia respecto de las actividades que son dictadas por adultos. “Que alguien de la misma edad les llame la atención ayuda porque no es lo mismo que una persona mayor les quiera imponer determinadas conductas”, completó Martina.
Entusiasmadas y con la esperanza de lograr que un sponsor acceda a costear algunos gastos que implica trasladar e instalar el sistema a los diferentes colegios que vayan a visitar, Martina y Romina agregaron que su iniciativa fue reconocida ayer por la Municipalidad de Godoy Cruz, debido al interés departamental que guarda la actividad.
