Una jornada de violencia inusual se vivió en la ruta nacional 7, en Uspallata, al producirse un corte del camino durante alrededor de 3 horas por camioneros internacionales y nacionales, que llevan varios días sin poder avanzar a sus destinos, que se ubican del otro lado de la cordillera.
Esto generó varios incidentes entre quienes protestaban y los automovilistas que pretendían acceder a los centros de esquí. Tal situación tuvo su detonante cuando a media mañana, al recibir los transportistas la información de que se producía una nueva interrupción del paso internacional Cristo Redentor por decisión de la autoridad trasandina.
De acuerdo a fuentes que estaban en el lugar, alrededor de las 10.20, Chile dispuso la clausura del paso para todo tipo de automotores. La noticia cayó muy mal entre los transportistas que ya avanzaban hacia el límite internacional y en los que quedaban más abajo, a la espera de su oportunidad. Hay que recordar que el tránsito por el Corredor Bioceánico estuvo clausurado durante más de 10 jornadas, y la acumulación de los rodados de carga en el lado argentino como en el chileno, fue altísima.
La reacción de los que seguían aguardando arrancar en Uspallata no se hizo esperar, y muchos de ellos procedieron a clausurar la ruta nacional 7, casi enfrente del Área de Control Coordinado de Uspallata.
El inesperado bloqueo malogró el viaje que cientos de turistas nacionales y residentes mendocinos ensayaban hacia Penitentes, y otros puntos de alta montaña, para disfrutar de la nieve. En Uspallata se encontraron con que no podían avanzar más por la decisión intempestiva de muchos conductores de carga pesada, que habían colocado grandes piedras sobre la calzada.
Pese a la mediación de la Gendarmería Nacional y de los viales nacionales, la medida se mantuvo y la cola de autos comenzó a extenderse sobre la cinta asfáltica. Los particulares que estaban cerca del núcleo de la protesta, comenzaron a protestar por la decisión de no permitirles continuar con sus travesías.
Los ánimos se encresparon rápidamente y de los reclamos verbales, se pasó a las vías de hecho con pedradas que volaban de un lado a otro. “Fue un momento muy difícil, y de extrema tensión”, contó José, un conductor santafesino que pretendía llegar, con familiares, al centro de esquí Penitentes, para disfrutar de las distintas posibilidades que ayer ofrecía el centro deportivo, colmado de un generoso manto blanco.
La situación obligó a que el juez federal Walter Bento (Primer Juzgado Federal), interviniera y dispusiera medidas, exigiendo que se dejara habilitada por lo menos una mano de la calzada, lo que finalmente ocurrió cuando muchos paseantes, ante el cariz que tomaban los hechos, resolvieron regresar a sus hogares o a los hoteles donde se hospedan. Se espera que hoy el desplazamiento se normalice en los horarios previstos, de la mano de una bonanza en el tiempo, a partir de las 8.
Cabe recordar que los transportistas venían de estar varados durante varios días en el sector de estacionamiento cercano a la refinería de YPF y en el gran espacio del Área de Control Integrado de Cargas, en el kilómetro 1151, muy cerca del centro de Uspallata.
Según el relato de voceros de la Asociación de Propietarios de Camiones de Mendoza (Aprocam), entidad que no justificó ni avaló la medida de fuerza, algunos camioneros comenzaron a ponerse en marcha hacia su destino trasandino. Pero, en determinado momento, la coordinación chilena del camino internacional comunicó que debido a la existencia de hielo en algunas curvas de los caracoles chilenos (ruta 60), no se iba a aceptar el tránsito pesado ni de ómnibus, y sí vehículos vehículos livianos.
Comerciantes de Puente del Inca volvieron criticar el sistema de coordinación de ambas naciones “porque no se resuelve de una vez por todas la transitabilidad de los camiones, a los cuales se podría haber extendido los horarios, cuando el cruce estaba expedito en los días previos, para liberar el gran congestionamiento de unidades, en ambos lados de la frontera”, dijo un operador turístico de la zona.
Afirman que el buen tiempo se mantendrá en la semana
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN), basado en El Plumerillo, comunicó anoche que la montaña tendrá tiempo bueno, por lo menos durante tres jornadas a partir de hoy. Esa circunstancia alienta a las autoridades argentinas a que pueda liberarse el avance hacia territorio chileno de la mayor cantidad de camioneros, que durante días esperaron en vano cruzar la cordillera, soportando distintas complicaciones en los lugares donde se encontraban detenidas sus unidades. No se prevén, por ahora, temporales y nevadas en las altas cumbres. Para el llano se pronostica para hoy una jornada de buen tiempo, con poca nubosidad, aumento de la temperatura y una máxima de 19 grados.
Ese panorama también caracterizará al martes y miércoles, con marcas estarán en el orden de los 20 grados. Las mínimas en todos los casos y dentro del Gran Mendoza, se registrarán en la mañana temprano, con registros de 3 a 5 grados. En Penitentes los registros de nieve acumulada son altos y el centro de esquí podrá ser visitado hoy, día feriado, lo mismo que los parques de nieve ubicados a los costados de la ruta nacional 7.
