Por Dis. Interiores Noelia Serna
La calma infinita y la belleza indescriptible caracterizan a un lujoso hotel ubicado en una paradisíaca isla griega en donde la naturaleza y la arquitectura forman espacios sin más vocación que invitar a disfrutar del relax.
Simplicidad, confort y vistas sacadas de un cuento de hadas forman el combo de una tendencia que se viene destacando a la hora de disfrutar de unos días de descanso. Perivolas, un encantador hotel ubicado en Oia, en la isla griega de Santorini, es lo último y lo más top en lo que podríamos llamar “lujo relajado”.
Originalmente diseñado como una casa familiar, Perivolas todavía se siente como una residencia privada.
Originalmente diseñado como una casa familiar, Perivolas todavía se siente como una residencia privada. Íntimo en escala y atmósfera, cada casa es diferente. Fue construido por artesanos nativos utilizando materiales locales. Hasta allí sólo se puede llegar por mar, lo que acentúa la sensación de paz que ya brinda el paisaje.
Con una hermosa arquitectura, este impresionante hotel ofrece habitaciones levantadas en cómodos nichos, sofás bajos, alfombras tejidas a mano, paredes encaladas y techos abovedados para conformar una decoración atemporal y silenciosamente glamorosa.
Los interiores se recortan para que nada distraiga las vistas espectaculares ni perturbe la intensidad de la quietud. Los espacios en común son, por otro lado, un verdadero refugio que buscan la calma y la absoluta tranquilidad que se percibe de forma permanente. Todo, con el fin de combinar de manera perfecta la simpleza y el lujo.
Los interiores se recortan para que nada distraiga las vistas espectaculares ni perturbe la intensidad de la quietud.
Ingresá a la edición digital de febrero para leerla igual que en el papel, haciendo click aquí