Economía
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hace 11 horas
Cristina Fernández de Kirchner sigue con su ronda de entrevistas: después de Samuel "Chiche" Gelblung le tocó a Beto Casella, quien la recibió en de Radio Pop 101.5. Pero justo cuando la candidata a senadora de Unidad Ciudadana llegaba entró Gendarmería.
“Estoy sorprendida, llegó acá a la radio y me encuentro con un allanamiento de la Gendarmería. Podría entrar un gendarme y decir basta señora, se terminó", se quejó CFK el comienzo de su entrevista con Casella
"Están convirtiendo a la Gendarmería en una fuerza de choque", advirtió, aunque los gendarmes fueron con una orden judicial en el marco de las finanzas oscuras y las deudas de Cristóbal López.
Los periodistas, en cambio, tildaron de “sospechosa” la presencia de los gendarmes
"Te imaginás si nuestro Gobierno hubiera allanado Radio Mitre, hasta los propios no hubiesen pedido explicaciones…”, lanzó la ex presidenta.
Luego se calmó y habló de las elecciones. CFK consideró hoy que "la pregunta" a desentrañar en las próximas elecciones legislativas "es si la sociedad está dispuesta o no a darle un cheque en blanco a este Gobierno para que haga lo que quiera".
También afirmó que la toma de deuda actual es superior a la de la República Popular China, por lo que sentenció que "el mejor equipo de los últimos 50 años nos está endeudando por los próximos 100 años".
Fernández de Kirchner reiteró que el Gobierno prepara "el gran ajuste" para después de los comicios del 22 y añadió que "la pregunta es si la sociedad está dispuesta o no a darle un cheque en blanco a este Gobierno para que haga lo que quiera".
Más adelante, dijo que su gobierno "se peleó con los que se creen los dueños del país", no con "la verdulera o con el rotisero", y pronosticó que "en algún momento" volverá a hablar con el ex líder de la CGT Hugo Moyano.
"Mi gobierno se bancó ocho años de tapas (en los medios) diciendo cualquier cosa", evocó la ex mandataria.
Al referirse al caso de Maldonado, visto por última vez en Esquel el 1ero. de agosto pasado, Fernández de Kirchner sostuvo que "es inocultable que es un argentino que desapareció después de un operativo ordenado por un juez del que participó Gendarmería".
"Seguir negando esto es querer tapar el sol con las manos", y advirtió que a Gendarmería, que "era una fuerza con prestigio, con cariño inclusive en algunos lugares", las autoridades nacionales "la están sometiendo" como una "fuerza de choque del Gobierno".
