El gobernador, Alfredo Cornejo, se muestra entusiasmado por el hito que marcará esta semana: la reunión anual del Banco Interamericano de Desarrollo. No hay otro tema en los pasillos de Casa de Gobierno y tampoco otra tarea de relevancia. Casi toda la agenda oficial pasa por el encuentro que se desarrollará entre el 22 y el 25 próximos.
Cornejo está interesado en hablar de eso: "La importancia es superlativa. El BID otorga los créditos más importantes para el país y para la provincia a las tasas más convenientes. Eso justifica la importancia. En segundo lugar, hace muchos años que no se hace la asamblea anual en Argentina. La última vez fue en 1996 y nunca se hizo en el interior. Anteriormente se hizo en 1962. Un tercer dato es que a estas asambleas van entre dos mil y tres mil personas. Hoy ya están comprometidas más de cuatro mil que asistirán a nuestra provincia. Hay 160 periodistas de distintos países acreditados".
-¿El BID es uno de los principales acreedores de la provincia?
-BID tiene historia de muchos créditos que tienen que ver con riego agrícola y con esquemas productivos que se han incrementado. Tenemos 56 millones de dólares no reintegrables con los que estamos arrancando la Costanera y que suma otros subprogramas, como el data center para la provincia y los municipios, y la modernización de la gestión, incluida la despapelización de la Administración Pública, incluso del Poder Judicial. También nos están financiando el tramo superior del canal Cacique Guaymallén. Sí, es uno de los principales acreedores de la provincia.
-La obra del Cacique Guaymallén ¿es parte de los 56 millones de dólares?
-No. Es Prosap, programa en el que se ejecutan obras por 15.578.857,80 dólares que pone el BID y 5.946.337,90 dólares aportados por la Provincia.
-El Prosap no tiene buena prensa últimamente, por la denuncia contra la empresa Ceosa y algún funcionario de Irrigación.
-Hay denuncias de la Oficina Anticorrupción por obras que no son de mi gestión, pero que las están haciendo tanto Ceosa como otras empresas.
-Hay algún comentario de que habrá acciones de promoción social en la reunión anual del BID...
-En el catering todo el personal, mozos, ayudantes de cocina, son personas en situación de vulnerabilidad social; liberados del sistema penitenciario, mujeres víctimas de violencia y emprendedores de organizaciones barriales. Se ha hecho una convocatoria a través de los ministerios de Salud, Desarrollo Social y Deportes y de Economía, Infraestructura y Energía. Se viene capacitando a la gente hace tiempo y los alimentos son provistos por productores locales y organizaciones de economía social, todas nuestras. También las bolsas ecológicas para entregar presentes están siendo confeccionadas por La Rañatela. Allí trabajan 70 personas con discapacidad.
-¿También habrá recuperadores urbanos de Guaymallén?
-La comuna pone a disposición seis recuperadores urbanos en los diversos puntos verdes distribuidos en las sedes del evento. Ellos recibirán residuos y a su vez difundirán las bases del programa.
-Le cambio de tema. ¿Está usted lanzado a nivel nacional?
-La exposición nacional que he tenido es por haber asumido la presidencia del Comité Nacional, no ha sido buscada por mí. En lo particular, yo estoy concentrado en el gobierno.
-¿No quita tiempo a la gestión la presidencia de la UCR?
-Hemos hecho una sola reunión en la que juntamos todo: el comité y los legisladores nacionales. Después lo que me lleva es tiempo de llamadas telefónicas, de devolución de llamadas, de coordinación de los bloques legislativos. Después del BID, vamos a tener una reunión de Cambiemos en la que vamos a estar presentes.
En abril vamos a hacer una reunión de presidentes de comités provinciales del radicalismo en Mendoza. Me ha recargado horas de conversación y reuniones, no de alejarme de la provincia.
-Su posible candidatura a vicepresidente anda dando vueltas en los medios. A usted no le seduce mucho ese cargo...
-En lo personal no me seducen mucho los lugares legislativos. Si tengo que hacerlo, como parte de un proyecto, sí. He estado algunos años como ministro, fui ocho años intendente, llevo dos años y meses de gobernador. Me siento a gusto en los cargos ejecutivos.
-Aparecen sectores críticos del radicalismo nacional. ¿Cómo los contiene?
-Quiero que la UCR sea influyente, no por los cargos que ocupemos sino por las iniciativas que traemos en el marco de la agenda que requiere Argentina hoy: la reforma económica, que se vayan bajando progresivamente impuestos, que baje la inflación, que aumente el consumo, que aumente la inversión, que aumente el empleo privado y baje el público, y que se vayan reordenando los subsidios, direccionándolos a quienes los necesitan y sacándoselos a quienes no.
-Con los problemas económicos aparecen las críticas...
-Aprovechan la oportunidad.
-Pero las críticas se hacen atendibles.
-Por supuesto, hay millones de vasos vacíos que mirar. El punto es de dónde venimos. Por ejemplo, en el gas, pagabámos 11 centavos de dólar el BTU y el costo promedio entre lo que se extrae en el país y el que se importa era de 5,1 dólares por BTU. En el medio está la tarifa social que alguien paga. Llevar las tarifas de lo que pagábamos a lo que vale no es un tránsito fácil. Hay que tener liderazgo para explicar a la sociedad que era pésimo pagar 11 centavos de dólar.
-Cuando se pagaba la factura era fantástico...
-Por supuesto, pero lo que pasó es que decrecieron nuestras reservas y tenemos que importar más y eso es más caro. Tenemos que producir más y depender menos de la importación de gas.
Conflicto docente
Cornejo dice que quiere conservar la valoración que hace “la mayoría de la población de mi gestión”. Independientemente de quién haya ganado la pulseada con el SUTE, en el medio están 55 mil docentes cuya actualización salarial los dejó sin cláusula gatillo.
-Es probable que hayan perdido tanto el titular del SUTE como usted.
-Ningún conflicto y mucho menos con la educación es neutro. Hay costo.
Luego reitera su latiguillo de que el Gobierno representa el interés general y que en este caso eso implica que el sistema educativo funcione bien, que los chicos tengan clase y con calidad.
“El SUTE representa un interés particular, legítimo, pero particular. (Sebastián) Henríquez es parte de un grupo cercano al FIT y tienen por ideología no pactar con la patronal, pero la patronal no soy yo, es el pueblo de Mendoza que paga con sus impuestos el servicio educativo. No están negociando con la patronal sino con el administrador de la patronal”, dice Cornejo.
Luego explica que están planteando “una reforma al interior del sistema. Las maestras van a ganar más en promedio al final de mi mandato. Nadie va a perder el derecho a estudiar. No vamos a hacer viajar a nadie para estudiar. Derivado de eso, vamos a tener un promedio salarial del docente más alto de cómo lo recibí”.
-Hubo enojo cuando dijo que los docentes ganaban 18 mil pesos en promedio.
-El sueldo docente es bajo, el promedio es 19 mil pesos de bruto, unos 13 mil pesos netos. Lamento que sean bajos pero es lo que nos dejaron muchos años de mal manejo del sistema y lo vamos a dejar mejor de lo que lo encontré.