El objetivo es hablar como siempre de la pareja. Los temas giran en torno a la importancia del juego erótico, el sexo sadomasoquista, como también el intercambio de parejas, entre muchos otros. Una oportunidad única para escuchar a una especialista hablar de sexo de una manera desprejuiciada y divertida. También es una invitación para consultar y sacarse todas las dudas.
Rampolla nos visita en el marco de una gira por el país que incluye otras ciudades como Rosario, Olavarría, Tucumán y San Juan.
-¿Qué te trae nuevamente a nuestra provincia?
-En esta ocasión voy a llevarles uno de mis shows... espectáculos que ya, la verdad, no se en que categoría se encuadran (risas). Si bien no canto ni bailo, lo que presento, lo presento en un teatro, así que bueno... digámosle que es un espectáculo. Llevo una conferencia preparada para el público mendocino y quiero centrarme como siempre en el concepto de la pareja, que es un tema importante porque la gran mayoría de personas que vienen a verme y buscan consultoría… preguntan sobre la pareja. Yo lo que hago es exponer una serie de temas de una manera interactiva. Me gusta que el público levante la mano, pregunte, se saque dudas.
Siempre tenemos micrófonos para que nos hablen. También está la opción de que las personas anoten sus dudas por escrito en un papel porque hay gente que es más tímida. Por ahí se da en ciudades más pequeñas, que las personas suelen ser más conservadoras. Por ahí hay mujeres que no preguntan porque si van con el marido les da vergüenza. Por eso queremos asegurarnos que todos tengan la posibilidad de consultar.
-¿Qué esperás del mendocino?
-Quiero que ahora la gente se anime a llevar sus dudas al teatro, ir un poquito más allá. Y meterme de lleno en lo que es el juego erótico, porque cuando somos grandes, ya no con carritos y Barbies pero ¡podemos seguir jugando! Quiero invitar a las parejas y a las personas que aún no están en pareja, a saber de que se trata ese juego erótico. Enfocarse en eso que no es más que diversión y disfrute. Perder la idea de que el juego es poco responsable o poco serio. En realidad es muy necesario.
-El juego erótico, ¿para divertirse o para gozar más?
-¡Para todo! El juego te hace pasar un buen rato. Porque las relaciones no siempre son la película porno. Puede ser a veces una cosita mas relajada... pero que siempre este la idea de pasarla bien. Hay que jugar con la pareja para conectarse distinto.
-¿Qué tipo de juego?
-Jugar a que soy vaquera y te voy a montar, por ejemplo (risas).
-¿El mendocino habla de sexo fácilmente?
- El público de Mendoza es curioso y muy preguntón sobre sexo. Por lo menos esa experiencia viví. Y me llamó mucho la atención desde la primera vez que fui. Me acuerdo cuando los visité en el Teatro Quintanilla, una señora del público se paró con el pobre marido al lado y habló sobre la disfunción eréctil del señor. Fue muy cómico pero en verdad... la señora genial..
Fue un momento muy divertido pero también fue importante porque se animó a hacerlo, a hablar. A mí me habían dicho que los mendocinos se conocen entre ellos y que no se animan tanto… ¡pero no! La dinámica que se da con este show también genera eso ¿no? Que la gente se anima. En Le Parc pasó la mismo. Son un público muy atento y muy participativo.
-¿El boom de la literatura erótica te ayuda en tu trabajo como sexóloga?
-Por supuesto. "50 sombras de Grey" (2011, de la británica E. L. James) , trajo nuevas dudas. Las mujeres se animan a preguntar sobre el sexo sadomasoquista, el intercambio de parejas, etcétera. Así que todas esas cosas las vamos a charlar.
-¿Cómo influyen los cambios sociales y culturales en los interrogantes que los pacientes te hacen?
-Influye muchísimo. Porque nos cuesta manejarnos en el diario vivir con naturalidad. Cuando aparecen nuevos temas -con la literatura por ejemplo- se da el boom, entonces todos empiezan "¡Uy!, mira lo que dicen, mira lo que se ve, ahora podemos hablar sobre fantasías sexuales, sexo sadomasoquista en un contexto de pareja…¡wou! ¿Gente que se ama y se da golpes? No puedo creerlo" (risas).
Eso está buenísimo porque se abre la puerta para que uno como profesional pueda abordar diferentes temas. La literatura erótica a mi me facilita el trabajo. Cuando se destapó el tema del viagra ¡fue genial! Antes no se hablaba del tema. De repente hay una excusa válida para preguntar. Cuando salió la píldora anticonceptiva lo mismo. Se puso sobre la mesa como tema y se generaron nuevas preguntas. Siempre hay que ver que pasa socialmente y desde ese lugar ir manejando la información.
-Las fantasías sexuales ¿deben mantenerse como fantasías? ¿o hay que llevarlas al mundo de lo concreto?
-Esos son interrogantes que cada persona debe saberse responder por sí mismo, por eso hablamos tanto del tema de las fantasías para que el público sepa los "pro" y los contra de todo. En términos generales, el mejor lugar que tiene la fantasía es tu propio cerebro. No todas las fantasías hay que contarlas. Hay que tener en cuenta que una vez que la fantasía fue llevaba a realidad, pierde su carga erótica. ¿Vale la pena arriesgar la fantasía por la realidad? Tal vez no esté tan bueno… o sí. Es muy muy personal.
-¿Hoy la mujer es realmente independiente en lo respecta al ámbito de la sexualidad?
-Creo que aparentamos ser muy independientes por haber una proliferación de información y bueno... nos damos cuenta que el placer también es para nosotras. La mujer está mucho más proactiva que antes en términos de placer sexual. Hace trece años atrás cuando yo empecé con la televisión latinoamericana hasta acá, he visto una gran evolución.
Pero no sé si realmente hay una real independencia y seguridad, puede que sea aparente. Ahora está la expectativa y se espera que la mujer goce y se "independice" pero no estamos tan adueñadas de nuestra sexualidad. Es un proceso; tampoco se depende tanto del hombre como antes. Ha habido un avance.
-Capaz que es una frase hecha ¿no? "Ahora lo único que quiero es liberarme sexualmente y utilizar todos mis mecanismos para no sufrir frente al abandono del hombre".
-Claro. Es que el control, el manejo del sexo, tienen que disfrutarlo en pareja. La mujer va a estar siempre sometida en la medida que haga en la cama todo en pos del otro para "mantenerlo", sin ponerse en primer lugar al momento del disfrute.
-¿Tenés consultas frecuentes sobre las relaciones "tóxicas"? ¿Es cierto que con frecuencia esas parejas la pasan genial en la cama?
-Claramente es cierto. Hay una explosividad y una pasión que generalmente está en esas relaciones tóxicas que muy fácilmente se traduce a la cama y muchas veces es uno de los motivos por los que las personas se mantienen en esa relación y dicen: "Hay muchas cosas que no funcionan, pero esto ¡vaya que funciona! y funciona ¡tan bien!" Para muchas personas el buen vínculo sexual es motivo para mantener la relación.
A mí personalmente no me parece que es suficiente motivo. Siempre lo he dicho: el sexo es muy importante pero no es lo más importante en una pareja; y el buen sexo solamente no mantiene una relación. Desde mi perspectiva profesional la recomendación siempre es que si hay buena química sexual ¡disfrútala! Pero arma tu relación con una persona con la que hayan otros temas.
-En definitiva, ¿es esencial para la vida personal tener una relación sexual amorosa?
-Si lo que quieres es una relación sexual de pareja estable y a largo plazo sí, sin duda. Si lo que quieres es sexo casual, no necesariamente (risas). Siempre con cariño, eso sí. Pero a veces no hay amor. Pero a ver... cuando hay una relación de pareja, por más que sea sexy, erótica y tengan sexo súper caliente tiene que haber una base de amor porque de lo contrario, no se permite tampoco tanta expresividad sexual.
-¿Cómo se hace para incrementar la pasión en invierno?
-¡A mí al menos no se me hace tan difícil! (risas) Invéntate un juego de frotación contra la ropa (risas). Es cómico porque se dice que en verano la gente se destapa y es más sexy pero cuando hace calor lo que menos quieres es que alguien se te pegue porque es mucho sudor y te da asco (¿o no?) (risas) En cambio con el frío eso no pasa... buscas el calorcito de la otra persona y eso es la más rico, ¿Cierto?
