El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) declaró en situación de emergencia fitosanitaria a San Rafael, tras la detección de ejemplares machos y hembras de la mosca de los frutos, una de las plagas más dañinas para la actividad frutícola a nivel internacional.
Es por ello que el Iscamen invertirá 3 millones de pesos con el objetivo de iniciar un plan de acciones correctivas en la localidad de Villa Atuel, San Rafael, luego de que en la red oficial de trampeo del organismo se encontraran estos dos ejemplares fértiles.
Para los productores locales esta situación en la cual se encuentra esta región está relacionada a la crisis del sector, a los bajos precios y al abandono de las fincas.
Cabe indicar que según el Instituto de Desarrollo Rural la zona sur de la provincia sigue siendo la de más hectáreas implantadas. En la actualidad entre los departamentos sureños (San Rafael y General Alvear) concentran el 31,5% de las hectáreas cultivadas con montes frutales en Mendoza.
En total, según los datos del IDR, entre San Rafael y General Alvear existen 18.397 hectáreas implantadas con frutales. De las cuales, San Rafael concentra más del 90%.
El segundo lugar lo ocupa el creciente Valle de Uco, luego le sigue la zona Este y por último la zona Norte.
Entre la producción sureña se destaca la ciruela industrial con 11.500 hectáreas, el durazno industrial con 2.400, el durazno para consumo con 1.800, la pera con 1.660, el damasco con 620, la ciruela de consumo con 335, la manzana con 73 y la cereza con 9 hectáreas.
Por lo tanto, la importancia en dónde aparece la mosca toma una relevancia aún mayor por el protagonismo que tiene la fruta en esa zona de la provincia y lo que su extensión podría causar.
Panorama provincial
En primer lugar, el presidente de Iscamen, Alejandro Molero, contó que la provincia en general y San Rafael en particular, no pierden el estatus fitosanitario de la región por estas capturas.
Sin embargo, ante el hallazgo de ejemplares de mosca en Villa Atuel "es necesario establecer distintas medidas ante una emergencia fitosanitaria dentro de un área regulada de 7,2 km de radio, con epicentro en el sitio donde se produjo la detección de la plaga", remarcó el funcionario y agregó que "el objetivo además de asegurarnos que no hay más moscas en la zona es proteger las áreas reconocidas internacionalmente y mantener el estatus de Área Libre de plagas".
Por esta situación Molero explicó que en el área afectada se intensificarán las acciones de control, entre ellas la recolección y posterior enterramiento de los frutos caídos; descarga de los frutos hospederos de mosca del Mediterráneo; remoción del suelo bajo la proyección de la copa de los árboles y aplicación de insecticida; regulación en el tránsito de vegetales dentro del área; entre otras acciones.
Para el desarrollo de estos procedimientos y la atención directa a los productores de la zona se habilitará una oficina temporal de Iscamen en Villa Atuel y "se establecerán nuevas barreras fitosanitarias para controlar todos aquellos cargamentos que pasan por allí, tanto para salir a otras provincias como aquellos enfocados a exportación. Sin esto no podrán salir del país".
En este punto hizo hincapié el funcionario que la comercialización no se frenará por este protocolo de control, tanto en Argentina y Mendoza, así como las exportaciones. "Lo que sucederá es que tanto los camiones, como contenedores, deberán ser analizados y una vez que los técnicos consideren que no hay foco infeccioso se eleva una autorización por nosotros. Con esto el producto podrá ser comercializado", remarcó Molero.
Actualmente, "dentro del área regulada sólo se encuentran activas producciones de aceitunas y granadas. Las primeras sin ningún tipo de complicaciones debido a que son para industria, y su movimiento es dentro del área regulada. No obstante ello, es importante analizar todo, ya que aún queda un poco de otro tipo de frutas", explicó el presidente del Iscamen.
Acciones correctivas como las que se desarrollarán en Villa Atuel se implementan en todas las Áreas Libres del mundo a partir de detecciones de ejemplares silvestres. Ejemplos de ello: Chile (recientemente) y procesos similares en la Patagonia argentina (2006 y 2015).
Preocupa en San Rafael el abandono de montes frutales
El sector de la fruta en fresco no vive su mejor momento y el productor no soporta los incrementos de costos y los bajos precios de la materia prima durante este año que han estado en valores iguales al de la temporada 2017. Por lo tanto, el margen de rentabilidad de los productores es casi nulo y hasta negativo. Bajo este panorama es que más de un productor ha dejado este año la fruta en el árbol, ya que el costo por levantar iba a ser más alto que luego la ganancia que iba a obtener en el mercado.
Bajo este panorama es que los empresarios indican que esta situación termina impactando en la aparición de plagas, como ahora la de la mosca del Mediterráneo.
Cristian del Pozzi, de la Sociedad Rural de San Rafael, y productor de la zona dijo que esta situación está motivada por la falta de rentabilidad de los cultivos. "Este año se ha pagado muy poco y la gente opta directamente por abandonar la finca y no levantar la fruta, que luego se pudre y termina cayendo al piso y genera enfermedades en ese sitio y en los alrededores".
Pero también, y debido a que se está pagando muy poco, los productores no hacen las fumigaciones correspondientes, en cuanto a tiempo, forma y cantidades. Por lo tanto, "las fincas están permeables a tener focos de infección", remarcó Pozzi.
Marcelo Serrano, presidente sociedad rural de San Rafael y productor de durazno, ciruela y uva, concordó y dijo que "los abandonos de la fincas han sido una realidad de esta temporada y muchas hectáreas han quedado sin fumigar. Esto pudo motivar la aparición de esta plaga que había sido una cuestión del pasado. Sin embargo, también consideramos que pudo haber algún descuido en el control de las fronteras por donde ingresó".
No obstante, Serrano aclaró que “es importante el trabajo que están realizando porque a la crisis del sector esto podría terminar perjudicando aún más al sector, ya que este año hemos visto muchas frutas podridas en el piso y cítricos en casas privadas en los árboles. Todo esto son caldos de cultivos, no solo para la mosca, sino también para otras plagas”.