La temporada de festivales está que arde, y no sólo por la temperatura. Los primeros meses del año llegan con los tradicionales festejos de varias provincias y con ellos empiezan a girar artistas por todo el país.
El próximo fin de semana llega Rivadavia Canta al País, el convocante festival del Este. En su edición número 33, el festejo durará tres días y reunirá a varios artistas consagrados de la escena popular y folclórica.
Entre el viernes y el sábado, Vicentico, Víctor Heredia, la Sole Pastorutti, los Pimpinela, La Barra y muchos artistas más pasarán por el escenario. Para el domingo, el cierre estará a cargo de Alejandro Lerner, que viene llevando a cabo presentaciones por diversos festivales, como Jesús María. Luego del festejo del 35° aniversario de "Todo a pulmón", el compositor encara un nuevo año, con planes de nuevo disco y bajo la premisa de seguir incursionando en la música a la espera de dejar canciones que sigan marcando nuestra cultura.
-Principio de año siempre es una temporada envuelta en festivales, sobre todo en el interior del país. ¿Ha sido movido?
-Muy movido. Estuve un mes afuera en Estados Unidos, volví hace dos semanas y desde que llegué ya hemos hecho cinco conciertos en lugares realmente importantes como Jesús María. Vamos a estar en San Juan ya cerca de Mendoza y vamos a tener unos veinte conciertos de acá a marzo.
-¿Ves distinto la presentación en festivales a los shows propios?
-Es distinto porque te encontrás con muchos amigos. La sorpresa es ver muchos festivales que hace tiempo había dejado de hacer porque por lo general, en enero me voy a EEUU para trabajar allá. Este año decidí venir a trabajar acá y fue una linda decisión. Los festivales son de mucho prestigio, donde te encontrás con amigos como Víctor Heredia, Nahuel Pennisi, compartís escenario con la Sole, con Abel. Te encontrás con muchos amigos y también es el encuentro con festivales que tienen que ver con nuestra cultura: el festival de la Doma, de la Fiesta de la Frutilla y muchos más, que son expresiones muy profundas de nuestra argentinidad.
-Ahora que estás volviendo, ¿cómo estás trabajando con las composiciones para este año?
-Estamos preparando un disco nuevo con duetos, convocando a amigos y a artistas eclécticos del mundo. Te hablo de Bajofondo, por ejemplo, pero no te quiero contar más para no arruinar la sorpresa. Va a ser un disco con algunas canciones inéditas y otras que ya son clásicos.
-A la hora de componer nuevamente, y ya pasada la gira de aniversario de "Todo a pulmón", ¿sos el mismo Alejandro de siempre en estos procesos?
-No, siempre estoy buscando. Ahora estoy investigando todo lo que tiene que ver con EDM (Electronic Dance Music). Es un género que nunca había curtido demasiado a nivel compositivo, pero me gusta. Tiene mucho de investigación, así que estoy trabajando en eso, en entender un poquito cómo es el lenguaje . De eso se trata: seguir investigando, seguir entusiasmado. Cuando tengo un rato después de las giras me encierro en mi estudio y empiezo a escuchar, además estoy haciendo cursos de ingeniería de grabación constantemente.
-¿Estás componiendo para otros artistas, como ya has hecho antes?
-Sí, estoy preparando material para otros músicos, dentro del poco tiempo que me queda. El año pasado fueron más de 70 conciertos , este año se espera lo mismo. La nueva versión de “Todo a pulmón” tuvo un enorme recibimiento en toda la región. Estamos trabajando mucho.
-¿Qué es lo que más te gusta: estar todo ese tiempo de gira o sentarte a componer en tu estudio?
-Yo creo que hoy la vida me presenta las opciones como para que yo las armonice. Tiene que ser un equilibrio. Fundamentalmente creo que la familia es una prioridad, porque soy papá de dos chicos. Y por otro lado lo puedo compartir, muchas veces vienen de gira conmigo. A esta edad me doy cuenta de que es importante equilibrar las dos cosas. No se puede hacer una carrera exitosa si tu vida familiar no lo es. Es una pata fundamental.
-Hace poco nos dejó Ulises Butrón y vos fuiste uno de los que lo recordaron. ¿Qué recuerdos te quedan de él?
-Con Ulises fuimos muy amigos, en las buenas y en las malas. Me queda su talento: poca gente podía hacer sonar una guitarra como cuando él la agarraba. Tenía una fineza y una sensibilidad que eran increíbles. Lo he llevado de gira, hemos grabado juntos y hemos compartido cosas personales. Es una gran tristeza, es otro groso que se nos va.
-Teniendo en cuenta lo que está pasando a nivel político en Latinoamérica y vos siendo un artista tan popular en toda la región, ¿cuál es tu visión sobre lo que está pasando y el papel que tiene que tener la música?
-Yo creo que cada país es un lugar en el tiempo: hay países que viven el aquí y ahora, otros que se han atrasado en el desarrollo natural de la sociedad. Otros tienen circunstancias políticas absolutamente alejadas de la región, como es el caso de Venezuela en el último tiempo. Tienen una situación interna que no los ayuda ni a crecer ni a reconectarse con el mundo. Son las sociedades las que crean los cambios, no los gobiernos. De alguna manera los pueblos de la región son los que marcan su estado de evolución y conciencia. Los grandes cambios del mundo los hicieron las personas del pueblo. Los gobiernos tienen que escuchar y responder a lo que están exigiendo.
-¿Y en nuestro caso?
-Argentina es un país que tiene un potencial increíble y por algunas razones o idiosincrasias no podemos terminar de estar en el lugar que podríamos estar. De cualquier manera, uno toca para la gente, nunca toca para los gobiernos. Y eso es maravilloso. Acercarse a la gente de cada país, o incluso que argentinos que están disgregados en el mundo se te acerquen, también es maravilloso.
-La música históricamente reflejó lo que pasaba en una sociedad, ¿seguís viendo eso ahora?
-Creo que ahora está más lavado. Pensá que nuestra generación tuvo la transición dictadura-democracia, eso generó en nuestra poesía un documento. Gracias a Dios ahora estamos conviviendo y nuestros problemas se pueden discutir en democracia, más allá que eso no elimine ni la pobreza ni el hambre. Por lo menos nos expresamos sin tener miedo de que a uno lo desaparezcan. Creo que los años dos mil no han generado una expresión cultural profunda, y creo que tiene mucho que ver con la tecnología y el confort que te da. Creo que faltan canciones: es un documento muy importante que te ayuda a reflexionar y siempre va a volver cuando la gente la necesite.
Rivadavia Canta al País
Viernes 1 de febrero: Vicentico y Victor Heredia.
Sábado 2 de febrero: Soledad y Pimpinela.
Domingo 3 de febrero: La Barra y Alejandro Lerner.
Entradas:
Las personas que viven en Rivadavia, acreditando su residencia podrán adquirir un abono para las tres noches de $350.
Para el resto de los asistentes al festival, tiene un costo de $450.
El valor de la entrada por noche es de $200.
Los niños menores de 11 años no abonan ingreso.
Preferenciales: $500 (todas las entradas de tipo preferenciales pagan, inclusive los menores de edad).
Puntos de venta:
Cine Ducal de Rivadavia (lunes a domingo de 8 a 13 y 18 a 22; en Lavalle 740). Los días de Festival en horario corrido.
Venta online en www.fullticket.com