"Seria muy injusto decir que uno es mejor que el otro", decía Juan Alejandro Abaurre, el padre de la criatura con la derrota por penales aún resonando en los bombos y las trompetas de los hinchas de Defensores de Belgrano en Villa Ramallo. Lo decía para destacar el enorme trabajo colectivo de su equipo en una serie de 180' cargada de emociones ajenas a este deporte. Y lo expresaba también para elogiar al rival, que mostró sus credenciales de equipo serio y con pretensiones de todo.
El DT lo hizo mirando al espejo, sabiendo que aún sin tanta riqueza técnica en el banco como Defensores de Belgrano, eran equipos similares por historia y condiciones. Los dos se encontraron de golpe con escenarios inesperados.
Uno, los de Abaurre, debieron batallar en una Fase Reválida dónde empezaron a mostrar que la Primera Ronda tenía demasiadas injusticias. El otro se aseguró el pase a la Fase Clasificatoria y en la última fecha perdió su boleto a manos de Gimnasia y Esgrima de Mendoza. Ambos supieron entonces que había que redoblar esfuerzos y compromisos. Y lo hicieron.
El plantel Celeste y su cuerpo técnico, dotaron al equipo de una estructura defensiva difícil de vulnerar. Martínez Gullota en el arco, Orué, Barrera, Nievas y Vizaguirre en el fondo y el compromiso de todos los volantes (emocionante lo de Dávila) lo blindaron para enfrentar toda clase de situaciones. Si hasta el rival del martes, preparado para jugar en condición de local con mucha gente, naufragó en su intento de lastimarlo. Faltó el peso ofensivo de un enorme Nicolás Gatto, más goleador que nunca y quien se quedó afuera por cinco amarillas.
"Un desacople puede ser fundamental", repetía Abaurre. Y cuánto lo estarán lamentando en Calle Boedo. Porque fue el único error en 90 minutos donde Gutiérrez mostró su enorme lectura del trabajo táctico de su rival y lo anuló por completo.
“Después los penales son otra cosa”, aseguraba el Cachorro. Claro, ahí juegan cuestiones internas de cada jugador y el fútbol se vuelve injusto. Aunque Abaurre no quiera decirlo y prefiera destacar lo hecho por unos y otros. Al final lo hizo: “Es injusto decir que uno fue mejor que el otro”.
Dejó una marca este equipo. Afirmó convencimientos y ratificó el camino elegido. Ahora será tiempo de dejar descansar a varios. La revancha, con agosto sonando como fecha de inicio de un nuevo torneo, está a la vuelta de la esquina.
Soplan vientos de cambio
¿Se quedan? Muchos son los nombres que se destacaron durante la temporada en Gutiérrez Sport Club. Los más optimistas sueñan con retener a Alejandro Capurro y Nicolás Gatto. Obvio, también esperan la continuidad del DT. Sin embargo, todavia no hay confirmaciones y por el goleador ya preguntaron desde otros lados. Uno que si dejaría el Cele es Mauro Vizaguirre, quien es pretendido por Bichi Fuertes en Huracán Las Heras.
En el Lobo suena Daniel Garro
Gabriel Carabajal era la obsesión que tenía Darío Alaniz, DT de Gimnasia y Esgrima, para reforzar el plantel de cara a la Quinta Etapa del Federal A. Pero desde Godoy Cruz, dueños de la ficha del jugador, no están dispuestos a cederlo a préstamo.
Por tanto, la dirigencia y cuerpo técnico del Lobo pusieron los ojos en Daniel Garro, ex Estudiantes de San Luis, quien actualmente tiene poco rodaje en Sarmiento de Junín. Y esa actualidad hace que el volante se muestre interesado en la propuesta del Mensana.
Bastianini, alta para Huracán
Desde que Esteban Fuertes se hizo cargo del plantel profesional de Huracán Las Heras, con vista al estreno en el Federal A, empezaron a sonar muchos nombres importantes y uno de ellos es el de Rubén Ramírez.
Sin embargo, el primero con trayectoria en llegar es Damián Bastianini, ex jugador de San Martín y de último paso por Gimnasia de Concepción del Uruguay. El volante central en breve estará a disposición del Bichi. "Este club obliga, pero primero hay que afirmarse en la categoría", señaló ayer.