El presidente Alberto Fernández reveló este viernes que aprovechó su encuentro con el papa Francisco para analizar las gestiones que lleva adelante el Gobierno nacional para renegociar los términos del pago de la deuda y evitar un default, y dijo estar "seguro" de que el Sumo Pontífice "hará lo que pueda para ayudarnos".
"El Papa ya nos está ayudando mucho pero no necesariamente tiene que andar mostrando que ayuda. Ya nos está ayudando mucho y yo valoro mucho toda esa ayuda. Pero la verdad que valoro la ayuda del Papa porque es un argentino preocupado por su patria, básicamente por eso. Porque está preocupada por su gente, porque toda la deuda trajo pobreza y marginación y postergación de muchos sectores de la sociedad", dijo el Jefe de Estado durante una conversación con los periodistas argentinos que lo acompañaron durante su viaje oficial al Vaticano.
Y seguido remarcó: "El Papa estoy seguro que va a ser lo que pueda hacer para ayudarnos".
Fernández fue recibido más temprano por Francisco, con quien mantuvo un encuentro a solas en la Biblioteca Privada del Pontífice, donde hablaron sobre la situación económica y social de la Argentina.
Durante ese contacto con los medios, el Presidente resaltó que tuvo “una reunión con el Papa muy grata, más que grata”. “Siempre verlo al papa Francisco para mi es reconfortante, todos saben la opinión que tengo sobre él, me parece un pastor de la Iglesia enorme y un líder moral inmenso, y me pone muy contento poder haber hablado con él como hablamos”, destacó.
“Hablamos 45 minutos, juntos, los dos, de lo que le pasa a la Argentina, de lo que pasa en el mundo, de lo que nos preocupa. Con muchas coincidencias gracias a Dios. Escuchando su opinión y también algunos consejos que a mí me ayudan. Y muy reconfortado por todo su compromiso con nosotros”, completó.
Fernández detalló que luego se reunió con el secretario de Estado de la Santa Sede, el cardenal Pietro Parolin. “Hablamos un poco de las cosas que nos preocupan y nos vinculan; hablamos de la situación argentina, de la situación de la pobreza, le conté en detalle cómo es el plan de la lucha contra la pobreza en la Argentina, de lo mucho que hacen los curas villeros en la Argentina en la acción de la lucha contra la pobreza; hablamos de Venezuela, que es un tema que le preocupaba al secretario de Estado y también allí encontramos coincidencias”, recordó.
Desde la Santa Sede informaron que durante el cónclave se abordaron temas como “la crisis económica y financiera en el país, la lucha contra la pobreza, la corrupción y el narcotráfico, la promoción social y la protección de la vida desde la concepción”.
“En este contexto, se señaló la importante contribución de la Iglesia Católica en favor de toda la sociedad argentina, especialmente de los sectores más vulnerables de la población. Asimismo, se abordaron también temas de interés común en la región”, informaron en Roma.
La reunión forma parte de una gira que también incluye visitas a Italia, España, Francia y Alemania.
La recepción del Presidente, la primera dama, Fabiola Yáñez, y de la comitiva estuvo a cargo del regente de la Casa Pontificia, Leonardo Sapienza, en el Patio de San Dámaso, donde se izó la bandera argentina junto a la de la Santa Sede. Allí un cordón de honor formado por integrantes de la Guardia Suiza rindió honores al Presidente.
Al término de la reunión con el mandatario argentino, el Papa Francisco saludó uno a uno a los miembros de la comitiva, tras lo cual ambas autoridades intercambiaron regalos.
Acompañaron al Jefe del Estado y a la Primera Dama, el ministro de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, Felipe Solá; la ministra de Justicia y Derechos Humanos, Marcela Losardo; el secretario de Culto, Guillermo Oliveri; el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz; el secretario de Comunicación y Prensa, Juan Pablo Biondi, y el Jefe de Gabinete de Cancillería, Guillermo Justo Chaves.
La gira continuará esta tarde con sendos encuentros con el presidente del Consejo de Ministros de Italia, Giuseppe Conte, y con el presidente de ese país, Sergio Mattarella.